Diez vecinos de Tarragona serán los primeros refugiados climáticos de España: "No estamos preparados para lo que viene"

Madrid

Diez vecinos de Alcanar, un municipio del Delta del Ebro, se convertirán en los primeros refugiados climáticos del país. Han asumido que deberán abandonar sus viviendas debido a las lluvias, cada vez más frecuentes e intensas, provocadas por el cambio climático.

Las inundaciones que sufren los vecinos de este municipio son cada vez más peligrosas y, ante la falta de soluciones efectivas, no les quedará más remedio que hacer las maletas. Las calles están llenas de barro, los muros caídos, los coches arrastrados por la lluvia y los jardines destrozados. Es la realidad que se vive en la zona más afectada de Alcanar, donde los vecinos aseguran sentirse cansados, resignados y hartos de vivir con la incertidumbre de que la situación se repita.

"Estamos muy cansados de que se nos inunde la casa tan seguido. La gente está desmoralizada, así no se puede vivir. No tienes por qué pasarte la vida rezando para que no se te inunde la casa", ha explicado una vecina.

La sensación general es la de estar atrapados en una historia interminable, un ciclo que se repite una y otra vez. El punto más crítico se encuentra en el barranco que divide una de las urbanizaciones del municipio: en un lado, las calles presentan afectaciones leves; en el otro, los destrozos son totales.

Una de las soluciones que se ha planteado es la expropiación parcial o total de las viviendas afectadas, aunque todavía no se ha definido ni el procedimiento ni los plazos. "El problema es grave y se tiene que tratar desde 2018. Hemos tenido mucho tiempo para negociar. Estoy convencido de que el año que viene estaremos otra vez en la misma situación", ha comentado otro vecino.

La posibilidad de expropiar las viviendas se debate desde hace al menos siete años. Tras cuatro temporales importantes, las esperanzas de los vecinos son escasas. Creen que ahora se habla del problema porque el último temporal está reciente, pero temen que todo acabe igual que siempre.

Los vecinos se sienten abandonados por las administraciones y viven en una calma tensa, sabiendo que, mientras no haya soluciones a corto plazo, cada episodio de lluvia puede volver a dejarles sin nada.

El peligroso triángulo mediterráneo

El triángulo entre Murcia, Cataluña y Baleares ha sido considerado como una zona singular y de riesgos por los expertos, al que se suma la zona de la Comunitat Valenciana.

Al hablar de las causas, los expertos apuntan a las principales variables: calor, humedad, montañas y valles donde se elevan corrientes de aire y vientos muy rápido. Desde 2022, el Mediterráneo ha crecido en temperatura y desde principios de los años 80, la temperatura superficial del Mediterráneo ha aumentado unos 0,34 °C por década. Esto deriva a catástrofes como la Dana.

"Hace falta un gran salto en la adaptación climática"

Xan López, miembro del Instituto Meridiano y experto en políticas climáticas y sociales, ha reflexionado sobre la urgencia de abordar la crisis ambiental en una tribuna publicada en El País. Asegura que España necesita un gran salto en la adaptación climática y que esta debería convertirse en una misión tangible con rango constitucional. "El urbanismo actual no está preparado para el clima de los próximos años. Es necesario garantizar unos mínimos básicos en materia ambiental", ha advertido López en La Ventana.

El investigador considera inviable un pacto de Estado en la actualidad, pero insiste en que la parálisis tampoco es una opción. Por ello, plantea un "plan B" que pase por consolidar el bloque de investidura como un “bloque histórico del clima”, capaz de impulsar políticas públicas estratégicas, necesarias e irreversibles. Este bloque sostiene que se debería garantizar la continuidad de las medidas más allá de los ciclos electorales.

López también alerta sobre el avance del negacionismo y el "retardismo climático", tanto desde la extrema derecha como desde algunos sectores de la izquierda europea. "La respuesta debe pasar por construir un proyecto de país ambicioso, con el respaldo de políticos y empresarios comprometidos". Ha propuesto que la transición ecológica se convierta en el motor de una revolución industrial verde y que se impulse un gran plan de adaptación con financiación suficiente y compromisos institucionales sólidos.