Totti, sobre su retirada del fútbol: "Releí la carta de despedida en el baño y lloré pensando en cómo habían pasado esos 25 años"

Francesco Totti, una de las mayores leyendas de la historia del fútbol, ha decidido reflexionar sobre su carrera deportiva. Tanto su retirada como su casi fichaje por el Real Madrid. Esto lo hizo de la mano de su amigo y excompañero, Luca Toni, en Prime Sport.

Totti tras 25 años en la Roma, el club de su vida, llegó a jugar un total de 786 partidos y marcar 307 goles. Desde que él se marchó no ha vuelto a haber un nueve como él en el club italiano. Siempre se dejaba el alma en el campo y mostraba su pasión por su escudo. Sin embargo, tan solo una vez estuvo a punto de marcharse de la Roma con opciones reales: "En 2004, podría haber ido al Real Madrid. Estuve muy cerca de fichar, solo faltó firmar. Mi corazón y mi amor por la gente prevalecieron".

"Spalletti llegó para obligarme a dejar el club"

El '10' romano ha confesado que también tuvo la tentación de la MLS estadounidense, e incluso recibió una llamada del recordado Sinisa Mihajlovic para fichar por el Torino antes de su despedida. Pero su respuesta siempre ha sido la misma: "Nunca habría aceptado vestir otra camiseta. No me arrepiento. Mi elección siempre ha sido la Roma o Roma. Desde el principio, pensé: aquí nací y aquí moriré".

Fiel a su palabra, Totti fue un futbolista de una sola camiseta, una rareza romántica en los tiempos modernos. Por eso, ha dolido tanto cuando ha recordado los últimos capítulos de su historia en el club. “Spalletti llegó a la Roma en 2016 para obligarme a dejar el club, con el apoyo del mismo. Siempre hubo problemas con él. En cuanto al cierre de mi etapa, fue el club quien me dijo que tenía que parar: un día vinieron a mi casa para comunicarme que jugaría el último derbi. No soy tonto. Sabía que tarde o temprano tendría que dejarlo, pero seguía sintiéndome bien de piernas y cabeza", decía un Totti nostálgico y muy emocionado.

"Durante tres semanas lloré todos los días"

Con serenidad, pero también con un poso de amargura, reconoció que aquel final le dolió más por parte de la entidad que por el técnico: "Quizás en esa ocasión, la Roma me decepcionó más que Spalletti. Creo que yo les molestaba. Les dije que jugaría incluso gratis. Por la Roma lo daría todo".

El adiós, inevitable, fue un proceso doloroso. Totti se desnudó emocionalmente al confesar cómo vivió esos días posteriores a su retirada: "Durante tres semanas, lloré todos los días, era frío con todos. Releí la carta de despedida en el baño y lloré, pensando en cómo habían pasado esos 25 años".

En tiempos de traspasos millonarios y carreras nómadas, su legado se levanta como un monumento al sentimiento, a la identidad y al orgullo de pertenecer a un lugar. Porque, como él mismo dijo, "mi elección siempre fue Roma".