Israel eleva su amenaza sobre Hamás y anuncia que el paso de Rafah no se abrirá "hasta nuevo aviso"
Hamás ha entregado los cuerpos de dos rehenes israelíes este sábado

Decenas de camiones de ayuda humanitaria cruzaron la frontera egipcia de Rafah hacia la Franja de Gaza. / Stringer (EFE)

Madrid
La Oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha anunciado este sábado que el paso fronterizo de Rafah, en la frontera entre Egipto y Gaza, no se abrirá "hasta nuevo aviso". En un comunicado, Israel ha elevado su amenaza sobre Hamás, a quien ha exigido la liberación de los cuerpos de los rehenes que siguen en la Franja. Como respuesta, el grupo terrorista ha entregado a la Cruz Roja los cadáveres de otros dos rehenes.
"La reapertura del cruce se considerará en base a la forma en la que Hamás complete su parte del acuerdo y entregue los cuerpos de los rehenes muertos", ha dicho la Oficina israelí.
A pesar de la advertencia de Israel, las autoridades palestinas aseguran que el paso de Rafah reabrirá el próximo lunes. "Tras comunicarse con las autoridades competentes de la República Árabe de Egipto, el cruce fronterizo de Rafah se abrirá a partir del próximo lunes 20 de octubre", ha anunciado la Embajada de Palestina en El Cairo, en un comunicado publicado en su cuenta de Facebook.
El paso llevaba cerrado por completo desde la ofensiva israelí sobre la ciudad gazatí en mayo de 2024 y es considerado por las organizaciones humanitarias como un punto esencial para la entrada de ayuda desde el sur del enclave.
La apertura del paso de Rafah permitirá la vuelta de los palestinos refugiados en Egipto
La apertura a la población "permitirá el viaje a los ciudadanos palestinos residentes en la República Árabe de Egipto que deseen regresar a la Franja de Gaza de acuerdo con el mecanismo de coordinación establecido", añade la nota oficial de la Embajada, que en breve comenzará a comunicarse con los ciudadanos para informarles sobre los horarios y lugares de reunión en preparación para el traslado hacia el cruce fronterizo.
A pesar de la seguridad que ofrece el comunicado del Gobierno, la decisión final queda en manos de la administradora militar israelí en los territorios palestinos ocupados, la COGAT, que hasta ahora se había mostrado en contra tras constatar problemas de seguridad.




