Prohibir la compra especulativa de vivienda es fácil si sabes cómo

Madrid, Baena

La semana en la que se ha concedido el premio Planeta, el Sindicato que Inquilinas de Madrid ha puesto en marcha una campaña con la principal accionista del Grupo Planeta y de una empresa que ha comprado un bloque en Madrid.

Nuestra compañera de Radio Madrid, Isabel Salvador, también se ha encontrando a vecinos de Lavapiés recogiendo firmas porque el barrio en los últimos meses se ha degradado tanto que sospechan que no es algo casual. Un barrio a 10 minutos de la Puerta del Sol y de Atocha. Un barrio que lleva tiempo sufriendo los efectos de la especulación inmobiliaria y la gentrificación.

¿La solución es prohibir la inversión inmobiliaria?

En la sesión de control de esta semana, Gabriel Rufián apuntaba porque no se impedía especular con la vivienda, como se hace en Ámsterdam. Pues parece que esta solución es fácil de implementar en España. Todo está listo en la legislación para hacerlo, según el abogado especialista en vivienda Pablo Feu. Hace seis meses el Plan Estratégico Metropolitano de Barcelona le planteó si era viable jurídicamente limitar las compras especulativas de pisos y él lo tiene clarísimo: "El urbanismo es la clave porque hay una ley de ámbito estatal que establece los principios básicos del urbanismo. En el artículo 3.2 de esa ley se dice que los modelos de ordenación de todas las ciudades en España tienen que garantizar la cohesión social y evitar la dispersión territorial".

O sea que el comportamiento del mercado inmobiliario estaría infringiendo ese principio por los precios tan altos que impiden el acceso al alquiler a las rentas medias y bajas. Eso les obliga a dispersarse por el territorio cada vez más alejadas de la gran ciudad y mal comunicadas. Pablo Feu añade "existe otro artículo, el artículo cuatro de esa misma ley que dice que la elección del modelo de ordenación es una función pública indelegable de las administraciones públicas. Por tanto, los particulares no pueden elegir el modelo de ordenación de las ciudades".

A las 6 de la mañana sobre el tractor. me siento la reina del mundo

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La campaña de recogida de la aceituna está a punto de empezar en Baena. Esta ciudad cordobesa es tradicionalmente olivarera y siempre ha marcado sus vidas. Nos hemos sentado a conversar con mujeres de diferentes edades para saber cómo era antes ir a la campaña, con toda la dureza pero también con la diversión y las relaciones que se establecían. Nos cuentan cómo es ahora con todo más automatizado, cómo es el futuro en el campo andaluz, con la falta de relevo generacional y un papeleo que les ahoga. Pero también con la tranquilidad y la felicidad que da estar en familia y a campo abierto todo el día.

Así lo entienden Ana que dice que cuando sale a las 6 de la mañana con su tractor al campo, se siente la reina del mundo. Su hija Ana se ha quedado con ellos. Es el futuro. Junto con la alcaldesa de Baena, María Jesús Serrano, están Nani (Encarna) de 77 años que lo recuerda todo, Rosario, Ángela, las dos Ana madre e hija y Ester una ingeniera agrónoma que es la que les lleva el papeleo y las asesora.