Joaquín Furriel reflexiona sobre el papel de los móviles en la educación de los hijos: "Percibo que no estoy hablando solo con mi hija"

Cada vez más padres sienten que no están solos cuando hablan con sus hijos. Que hay una tercera voz, invisible pero presente, que influye, condiciona y modela sus pensamientos. Joaquín Furriel lo expresó con claridad en La cena de los idiotés, de la SER: "Percibo que no estoy hablando solo con mi hija, sino con mi hija y el teléfono de mi hija".

El actor argentino, que actualmente interpreta a Ricardo III en los Teatros del Canal, compartió una reflexión sobre cómo los dispositivos móviles están alterando el vínculo entre padres e hijos. "Antes las subjetividades eran un poco más nítidas", dijo. "Por lo menos pasó a mí como hijo, el vínculo que tenía con mis padres era más claro".

Furriel relató cómo, al observar a su hija adolescente, notó un cambio repentino en su forma de ver el mundo. "Vi que algo había cambiado en mi hija, algo en su forma de mirar el mundo. Le pregunté qué le pasaba y me dijo que había estado consumiendo contenido que le hizo replantearse cómo encarar la vida, cómo pensar sus estudios".

Para el actor, los móviles no solo median la relación entre padres e hijos, sino que la transforman profundamente. "Hay que desarmar permanentemente un montón de subjetividades que están apareciendo desde el teléfono", advirtió. "Están estimulando zonas de ansiedad e inseguridad, sobre todo cuando los chicos están terminando el instituto y se enfrentan al mundo real".

Furriel insistió en que los padres deben asumir un rol activo frente a esta sobreexposición digital: "Hay que despejar esa maleza para poder calmar la cantidad de estímulos que tienen permanentemente. Por mucho que creamos que lo estamos controlando, es absolutamente imposible", concluye.