Perdió a su padre en la Guerra Civil y con 49 años descubrió que estaba vivo y tenía otra familia en Francia

Aurora Zárate, de 87 años, es una mujer llena de energía y su biografía está llena de paradojas asombrosas. Fue maestra en un colegio religioso durante 36 años, siguiendo los pasos que su madre diseñó para ella, fue concejala del PSOE por casualidad a pesar de ocupar los últimos nombres de las listas y se convirtió en una de las primeras mujeres de Albacete en divorciarse en una época en la que nadie se atrevía a hacerlo, y muchos menos entornos ligados a la Iglesia Católica.

Pero una de las facetas más sorprendentes de esta mujer que protagoniza la sección de Miss Experiencia de Hoy por Hoy este martes, es que se quedó huérfana con 15 años, aunque con 49 años descubrió que, en realidad, su padre estaba vivo y había formado otra familia en Francia. De hecho, Aurora nunca llegó a conocer a su padre en su infancia, puesto que ella nació 15 días después de que marchase para luchar en la guerra civil española.

"Mantuvieron el contacto hasta que yo tomé la comunión con 8 años", recuerda, asegurando que sus padres intercambiaron correspondencia a lo largo de los años, hasta que un día su padre dejó de escribir. "Le dijo a mi madre que fuera con él, que estaba trabajando. Pero ella quería que yo estudiara y esperar unos años. Si entonces él no podía volver, entonces si iríamos", explica. Fue entonces cuando nunca más supieron de él.

Un encuentro tirante

No vio físicamente a su padre hasta los 49 años, cuando, con ayuda de unas de sus hijas, dio con su paradero. La pequeña se fue a vivir a Murcia y, como su padre era natural de Fortuna, Aurora decidió ponerse a buscar en la guía de teléfonos a alguien que tuviera su mismo apellido. Con las pocas referencias que recordaba que le había dado su madre, logró hablar por teléfono con una mujer que le aseguró que conocía a algunos de los primos de Aurora. "Cuando me iba a despedir me dice: "¿Tú sabes que tu padre está vivo?" No sabes lo que me corrió por la columna", cuenta.

Eso incrementó su interés por desplazarse hasta Fortuna para conocer a sus primos y, cuando supo que su padre estaba allí, —visitaba Fortuna todos los veranos— se acercó para conocerlo. Aurora no tenía muchas expectativas sobre ese primer encuentro y, de hecho, fue bastante frío. "A gente de partido (PSOE) le dije que iba a ir y me dijeron que fuese preparada, que los que fueron a la guerra se quedaron allí", insiste, a la vez que recuerda que su padre dijo que verla le había parecido "ni fu, ni fa".

"Aquel día fue un poco tirante porque me presentó a su señora y me dijo que era una casualidad que fuese ahora a conocerlo con los años que tenía. Yo nunca me he callado y le dije: "Qué suerte has tenido porque que no me has tenido que pagar la carrera, ni la boda. Fíjate de lo que te has librado", dice, asegurando que con el tiempo sí se han relacionado, incluso su padre y su familia acudieron a la boda de su hija mayor.