Iván Ferreiro: "La nostalgia es una tela de araña preciosa, pero peligrosa"
El músico gallego repasa en La Ventana sus 35 años de carrera, entre canciones olvidadas, recuerdos brumosos y una gira que celebra el pasado sin quedarse en él
La Ventana de la Música | Iván Ferreiro
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Iván Ferreiro celebra 35 años de carrera con una gira que revisita su pasado sin caer en la trampa de la nostalgia. Invitado a La Ventana, el artista gallego repasó su trayectoria junto a su hermano Amaro, compañero de escenario y de vida musical. "La nostalgia es como una tela de araña, muy bonita, pero te puedes quedar pegado", confesó Ferreiro, que prefiere mirar atrás con vértigo, pero sin melancolía.
La gira, titulada Hoy por ayer, arranca en mayo y recorrerá ciudades como Bilbao, Barcelona, Sevilla y Madrid. En ella, Ferreiro rescatará canciones que no ha tocado en décadas, algunas incluso nunca interpretadas en directo. "No tiene nada de nostalgia, es como cosas nuevas", explicó. La selección del repertorio, sin embargo, ha sido un reto: "Tengo una lista de seis horas de concierto y estoy empezando a podar".
Durante la entrevista, Ferreiro recordó el tránsito doloroso de Piratas a su carrera en solitario, los primeros conciertos en Vigo y su etapa trabajando en un bar tras la disolución del grupo. También reflexionó sobre la evolución de sus letras, el abandono de la "canción arrojadiza" y la necesidad de escribir desde la felicidad: "Nunca he escrito una canción destrozado. Cuando lo he hecho, eran malísimas. Siempre he escrito desde la felicidad, desde la dispersión". Y añadió: "Yo no me encierro a componer. Si no me sale la canción, me voy a hacer otra cosa".
El artista también reflexionó sobre el paso del tiempo y la evolución de sus letras: "Cuando era joven jugaba mucho más a decir frases que me sonaban bien. Ahora tiro del instinto, de cómo suenan las palabras en mi boca". Algunas de esas frases, como "hay noches proclives a las averías", se han convertido en definiciones poéticas que conectan con su público
Ferreiro no esquivó temas espinosos, como su participación en festivales vinculados a empresas israelíes: "No me bajé del único que tenía porque hay gente que come de eso. Y si no cumples un contrato, te cae una multa que yo ni siquiera puedo pagar". Reivindicó su derecho a decidir sin que le dicten cómo ser un ciudadano ejemplar: "No soy un héroe, hago lo que puedo con mi vida".
La entrevista cerró con una interpretación en directo de Pensamiento circular, una canción que, como muchas de las suyas, crece desde el instinto y la memoria. "Aunque creo que no digo nada, siempre acabo acertando de alguna manera", concluyó.
