Kylian Mbappé, tras ganar su primera Bota de Oro: "A ver si es posible ganarla de nuevo el próximo año"

Bajo los focos, con un traje negro impecable y una sonrisa contenida, Kylian Mbappé subió al escenario para recoger un premio que no es solo un trofeo, sino un símbolo: la consagración de un sueño que lleva años construyéndose. El delantero francés, que atravesó momentos complicados la temporada pasada -donde incluso él reconoció haber "tocado fondo"- ha transformado la adversidad en impulso. Y el resultado ha sido descomunal.

La Bota de Oro de la campaña 24/25 lleva su nombre después de anotar 31 goles en liga, una cifra que resume su capacidad para aparecer, decidir y liderar. Pero la historia no termina ahí. Desde que se enfundó la camiseta del Real Madrid, Mbappé ha sumado 60 goles entre todas las competiciones.

"Espero estar aquí muchos años y dar alegrías"

Cuando le tocó tomar el micrófono, Mbappé no improvisó palabras grandilocuentes. Su voz fue firme, sincera, cargada de gratitud: "Voy a hablar en español porque en francés nadie me entendería (entre risas). Muchas gracias por estar aquí. Es un placer recibir este premio. Es un momento importante para mí. Es la primera vez que lo gano y significa mucho. También es de mis compañeros, que me han ayudado a llegar hasta aquí".

Se detuvo, miró al público, y habló desde un lugar más cercano, casi íntimo: "Jugar en el Real Madrid era mi sueño de niño. Espero estar aquí muchos años y dar alegrías a este club".

"Para mí es un placer estar aquí"

Recordó los días en Mónaco, los años en París, y ese cariño que lo acompañó incluso antes de pisar el Bernabéu. El delantero sabe que no camina solo, que su excelencia se multiplica porque a su alrededor hay un ecosistema que lo sostiene. Algunos de los que le han ayudado a llegar hasta aquí han sido Vinícius, Rodrygo y Bellingham. Los tres siempre han ayudado al francés a engordar sus estadísticas.

"Para mí es un placer estar aquí. Espero ganar este premio otra vez; a ver si es posible el próximo año", ha concluido un Mbappé sonriente y agradecido con su club.