Selecciona tu emisora

Ir a la emisora
PerfilDesconecta
Buscar noticias o podcast

Ricky Rubio se abre en 'El Larguero': "He vuelto a ser feliz jugando, antes me ponía una presión inhumana y robótica"

El jugador del Joventut Badalona habla sobre cómo ha vuelto a enamorarse del baloncesto tras sus problemas de salud mental

Ricky Rubio ha vuelto a ser feliz. Y eso, de por sí, ya es una gran noticia. Así lo reconoce el jugador catalán, mientras vuelve a enamorarse del baloncesto en el club que le formó y le dio la oportunidad de debutar en la élite, el Joventut de Badalona. Lo hace a sus 35 años, después de triunfar en la NBA y de tener que dejar el deporte de su vida durante un año completo para superar sus problemas de salud mental. Ricky Rubio ha vuelto a ser feliz. Y así nos lo ha explicado en 'El Larguero'.

Hablar de Rubio es hablar de uno de los grandes de nuestro baloncesto, de nuestro deporte y prácticamente de nuestras vidas. Miembro de la generación dorada de la selección española y del mejor baloncesto de nuestra historia reciente, Ricky no sólo ha vuelto a disfrutar en 'La Penya', sino que también está brillando con su juego. Eso sí, para él, los números ya no son lo más importante.

Más información

La entrevista con Ricky Rubio, en 'El Larguero'

¿Cómo ha sido volver al Joventut 20 años después?: "Últimamente me han recordado mucho esa primera temporada, son 20 años y pasa rápido. Esto está cambiado, pero la esencia sigue y hay incluso personas que se mantienen. Es verdad que en Badalona recuerdo ver el baloncesto desde muy pequeño en las calles, de hablar con mis amigos... El fútbol domina mucho, pero esta es una ciudad diferente".

Eso sí, has vuelto con buenos números...: "Bah, no he vuelto por eso. Al final es algo que ya no me preocupa nada. Es algo que me ha obsesionado, que me llegó a perjudicar, el pensar tanto en números. Y se está perdiendo un poco que el baloncesto es un deporte de equipo y que las sensaciones son diferentes a las cifras. Se ha quedado un poco obsoleto que los números sean el impacto real del jugador".

¿En qué momento notas y sientes que vas a volver al baloncesto?: "Cuando terminé en el Barcelona hablé con el Joventut, pero tenía esas sensaciones de que aún no estaba funcionando. Así que en agosto tomé una decisión muy dura: darme un año entero, pasara lo que pasara. Y es muy duro, porque durante ese tiempo, cada día se acerca más la retirada, lo noto, pero lo lucho para aguantar hasta junio y tener un año entero. En abril me pasan cuatro o cinco cosas que parecía que estaban hablándome, y decidí escuchar. En mayo dejé que esa sensación creciera dentro de mí y a finales de mayo, aunque no estaba 100% seguro, tomé la decisión".

¿Se puede decir qué cinco cosas fueron las que te pasaron?: "Son cosas que, aisladas, no tienen mucho sentido. Además, cinco cosas en cinco días seguidos. La primera fue una charla con un inversor, que tengo un negocio con él, que hablamos de todo menos el negocio... Se desencadenaron cosas que me estaban enviando una señal, me encontré con una persona del club que hacía tiempo que no veía y mucho más. Empezó a crecer esa semilla y yo estaba esperando una señal, porque no me atrevía a decir que había llegado el final. Lo hablo mucho con mi psicóloga: en la vida no hay finales de película, pueden ser malos. Realmente yo sentía que quería, pero ya no podía jugar más al baloncesto, porque tenía unos mecanismos inculcados durante 18 años. Así que esto me lo estoy tomando como una segunda carrera, eso sí, con 35 años".

En la final del Mundial que gana España en 2019 fuiste el MVP, te vimos anotar y asistir, pero nunca sonreír. ¿Cómo estabas en realidad en ese momento?: "El Mundial lo disfruté mucho, pero la presión que me puse y me he puesto siempre ha sido inhumana. Incluso robótica en muchos momentos. Pero ojalá pudiera haber disfrutado más del momento para que no me frenara. Donde realmente lo paso muy mal es cuando en 2022 estoy haciendo todo lo que es posible, me lesiono y estoy un año entero como un robot intentando volver. Vuelvo a debutar en Portland un 12 de enero y el 13 de enero es el cumpleaños de mi hijo. Y están celebrándolo todos aquí en España. Termina el partido, me voy sólo a la habitación y digo, '¿para qué?'. Me derrumbé en la habitación después de estar 10 minutos en pista y hacer 9 puntos. Por números no era".

¿Es este el momento en el que más estás disfrutando el baloncesto?: "Sin duda. Antes iba a los partidos casi con miedo. La tensión aún la tengo, pero era una presión que no le recomiendo a nadie. Cada partido era un examen y no disfrutaba. Ahora los veo con otra perspectiva y los números están siendo casi mejores que en otras temporadas. Pero no es eso... Es cuestión de actitud, de divertirme y estar presente en el momento".

¿Volver a Badalona siempre fue tu única opción?: "Sí, para mí, cuando me pasaron estas cosas era Badalona sí o sí. O salía lo del Badalona o me retiraba, porque no le veía otro sentido a seguir jugando. Para mí el deporte no es sólo jugar, es dejar un legado dónde me dieron la oportunidad de formarme y crecer. Y quiero dejar ese legado para los que vienen después".

¿Tienes la sensación de que, cuando sea, después de Badalona se acaba?: "Yo creo que sí... Pero también he visto que la vida da muchas vueltas, en muchas cosas. Ahora mismo la sensación es esa, no tiene sentido para mí como jugador y persona ir a jugar a otro sitio que no sea aquí".

Ricky Rubio se abre en 'El Larguero': "He vuelto a ser feliz jugando, antes me ponía una presión inhumana y robótica"

Ricky Rubio se abre en 'El Larguero': "He vuelto a ser feliz jugando, antes me ponía una presión inhumana y robótica"

00:00:0030:05
Descargar

El código iframe se ha copiado en el portapapeles

 

Directo

  • Cadena SER

  •  
Últimos programas

Estas escuchando

Hora 14
Crónica 24/7

1x24: Ser o no Ser

23/08/2024 - 01:38:13

Ir al podcast

Noticias en 3′

  •  
Noticias en 3′
Últimos programas

Otros episodios

Cualquier tiempo pasado fue anterior

Tu audio se ha acabado.
Te redirigiremos al directo.

5 "

Compartir