La UE logra que China suspenda los controles reforzados a la exportación de tierras raras durante un año
La decisión supone un alivio para sectores clave como la electrónica y las energías renovables
Maroš Šefčović, comisario europeo de Comercio y Seguridad Económica, ofrece una rueda de prensa sobre la UE. / OLIVIER HOSLET (EFE)
Madrid
China ha confirmado este sábado la suspensión, durante 12 meses, de los controles reforzados a la exportación de tierras raras y otros materiales estratégicos hacia la Unión Europea. La decisión, anunciada tras una videoconferencia de alto nivel entre el comisario europeo Maros Sefcovic y el ministro de Comercio chino, supone un alivio para sectores clave como el automovilístico, la electrónica y las energías renovables, altamente dependientes de estos recursos.
Sefcovic ha celebrado las "constructivas negociaciones" que han permitido frenar unas medidas que, desde octubre, amenazaban con desatar una crisis comercial entre Bruselas y Pekín. En su momento, el comisario calificó los controles chinos como "injustificados y dañinos".
Por su parte, el portavoz de Comercio de la UE, Olof Gill, ha valorado la suspensión como una "medida apropiada y responsable para garantizar la estabilidad de los flujos comerciales globales en un ámbito de vital importancia".
Un acuerdo alcanzado antes entre Estados Unidos y China
La medida se enmarca viene después de la reunión entre China y Estados Unidos que alcanzaron un acuerdo provisional para frenar la escalada de tensiones. En ese pacto, negociado en Kuala Lumpur antes de la cumbre entre Donald Trump y Xi Jinping, ambas potencias acordaron suspender por un año las restricciones a la exportación de tierras raras y evitar un incremento arancelario del 100 % por parte de Washington.
Trump celebró el acuerdo como un logro global y aseguró que el tema estaba "resuelto". "Es un acuerdo anual que se negociará cada año", declaró tras su encuentro con Xi en Corea del Sur. La presión estadounidense, que incluía amenazas de aranceles masivos, fue clave para desbloquear la situación, y la UE ha aprovechado ese marco para negociar su propia exención.
La UE se suma así a un acuerdo que, aunque inicialmente bilateral entre China y Estados Unidos, ha terminado por beneficiar a los principales actores industriales globales. No obstante, persisten tensiones en otros frentes, como el conflicto con la empresa china Nexperia, clave en la industria de semiconductores europe
