¿Es buena idea comprar una suculenta con la llegada del frío? Todas las respuestas sobre cómo les afecta el invierno

Nos centramos en una parte de la terraza en Gran Vía a la que llamo "zona desértica". En ella tenemos varias de las macetas que están compuestas por una mezcla de plantas suculentas. Las formas de estas plantas suculentas son únicas, y algunas incluso rozan lo extraterrestre. Recordamos a los oyentes que las plantas suculentas no se llaman así porque sean ricas para comer, sino que estamos hablando de todas estas plantas que tienen algún órgano de reserva de agua y de nutrientes. Normalmente, para cumplir esta función de reserva, engrosan los tejidos de las hojas y del tallo. Hay incluso plantas suculentas que no tienen unas hojas funcionales, y solamente tienen un tallo engrosado, como hacen muchos cactus. En muchos de ellos, las hojas se han transformado en espinas, como ya hemos hablado varias veces.

Cuando ampliamos la zona de plantación de la terraza, conquistamos una zona que es muy estrecha, casi como un pasillo, que llamamos "zona desértica", donde tenemos dos de nuestros grandes cactus: uno enorme y columnar, como un poste de una señal de tráfico, que es nuestro cactus de San Pedro (Echinopsis pachanoi, ahora conocido como Trichocereus macrogonus var. pachanoi), al que mencionamos el otro día cuando nos regalaron todas esas plantas en el Museo del Cactus de Casarabonela. También tenemos en otro macetón una chumbera (Opuntia cf. indica) bien vigorosa.

Ambos macetones con estos cactus los tenemos cubiertos con una gran variedad de plantas suculentas, y llenan la maceta e incluso descuelgan por fuera, impidiendo ver las paredes de plástico de los contenedores en los que crecen estos grandes cactus. Al lado, en esa zona estrecha, coloqué seis macetas que teníamos de terracota y las llenamos de sedum, crásulas y echeverias, todas ellas muy resistentes a la falta de cuidados, como puede ser la falta de riego. La mayoría las traje de esquejes, que fui pinchando en función de sus formas y de su hábito. Si la planta suculenta es colgante, pues evidentemente la colocaba en el borde de la maceta, para que descolgara fácilmente.

Un año y medio después de esta plantación, estas plantas se han ido conjuntando entre sí y mezclando sus colores y formas, y se podría decir que generan un efecto muy estético. Esta es la respuesta a todas aquellas personas que tienen un balcón y dicen que siempre se les mueren las plantas. Hay que hacer pruebas, por supuesto, porque no todas las plantas suculentas (o crasas, como se las llama también frecuentemente) sobrevivirán a nuestras condiciones de cultivo, pero muchas se adaptarán a las mil maravillas.

¿Qué factores impedirían que las suculentas se adaptasen, pese a lo resistentes que parecen ser?

El primer factor limitante de cultivo, una primera razón por la que pueden morir es por una iluminación inadecuada. Podemos pensar que todas estas plantas adoran el sol directo, cuantas más horas, mejor. Pero no siempre es así, y unas cuantas especies preferirán evitar las horas de sol más fuertes, que podrían quemarlas. Y, a la inversa, si tenemos una especie que adora el sol, incluso el más despiadado, y nosotros en casa no se lo procuramos, ahí puede surgir un déficit de energía que a la planta no le guste y la debilite.

Otro factor que puede hacer fracasar nuestro cultivo de algunas plantas suculentas es el frío, en aquellas regiones donde el invierno azote duro y las temperaturas bajen durante muchos días seguidos. En ese caso, algunas de estas especies pueden morir también.

Lo mejor es recurrir a tiendas y viveros especializados en este tipo de plantas, y que te asesoren: les dices el sitio para el que necesitas las plantas suculentas, con el tipo de insolación y si van a estar más o menos expuestas al frío, y te dirán qué especies son las más apropiadas. También se pueden hacer ensayos, y ver si esa planta sobrevive, aunque es más arriesgado y da pena que una planta muera por el frío, sobre todo. Como he mencionado antes, nuestras suculentas vinieron la mayoría de esquejes que compré en una feria de plantas aquí en Madrid, porque a estas ferias suelen ir productores de plantas suculentas que muchas veces venden esquejes de las plantas. Otros esquejes los saqué de mis propias plantas, que conozco bien y sé que van a las mil maravillas en las condiciones climáticas de Madrid.

Sustrato adecuado para las suculentas

Yo planté los esquejes en una mezcla de sustrato universal de granulometría gruesa, al que añadí una proporción de un tercio de arena de río, para mejorar aún más el correcto drenaje. En el resultado que vemos ahora se puede comprobar que esa mezcla les ha ido genial, porque todas las plantas están muy sanas y vigorosas.

Hacer estos jardines con muchas plantas suculentas mezcladas da mucha alegría, así que animamos a los oyentes a que hagan los suyos en la ventana de la cocina, en el balcón, en la terraza o en el jardín.

¿Cómo les afectará el frío?

Depende de cuáles. Por ejemplo, el árbol de jade (Crassula ovata), que tenemos en una jardinera que plantamos en uno de nuestros primeros programas, está activo y formando nuevas hojas. Incluso, en aquellos lugares donde el invierno no es demasiado frío, formarán sus flores blancas, un espectáculo absoluto, porque la planta se cubre con pequeñas estrellas de color blanco puro muy llamativas.

Otras que no duermen son los sedum (Sedum spp.) que tenemos aquí, porque otros sí que se van a dormir en invierno; pero muchos de los sedum que tenemos en las macetas ahora están superactivos y descuelgan por los bordes de la maceta: son principalmente las especies de sedum europeos. Hay un sedum que muchos oyentes reconocerán, porque crece en los tejados de las casas, y se llama uva de gato (Sedum album).

También estarán activas las madreperlas (Graptopetalum paraguayense y otras especies), así como las graptoverias (Graptoveria cv.). De hecho, uno de los esquejes que traje es de un híbrido de madreperla que tengo desde hace siglos, y que todos los inviernos me fascina lo preciosa que se pone la planta, porque empieza a crecer en septiembre y continúa incluso en las semanas frías, y se llena de hojas. Muchas de estas plantas son como flores, porque sus hojas crecen como si de una rosa se tratara, superponiéndose unas a las otras, en forma de alcachofa, tan bonitas.

Otras plantas suculentas sí que paran ahora en invierno, como el famoso aloe (Aloe vera) o los agaves (Agave spp.), como el ágave que llamamos pita (Agave americana), tan frecuente en muchas regiones españolas, como en Murcia o en Andalucía, por ejemplo.

¿Es buen momento para comprarlas ahora que viene el frío y llenar la terraza con ellas?

Depende un poco de cómo sea el lugar donde las vayamos a cultivar. Si a nuestra región ya han llegado las noches frías, debemos tener en cuenta que es posible que nuestras plantas provienen de una tienda o de un vivero en el que no están pasando nada de frío, así que tenemos que ser cautos.

La razón para tener precaución es ese cambio brusco de temperatura, que puede afectar a aquellas plantas que estén más débiles. Solo compraría esas plantas suculentas si veo que el vivero las mantiene fuera en el invierno, por lo que ya sabré que están aclimatadas al frío.

Una buena cosa es que te den la planta suculenta de esqueje, si la tiene un vecino o una amiga. Así sabes que esa planta resistirá lo que le echen, porque la persona que te la da la tiene en cultivo desde hace tiempo, incluso desde hace años, como me ha pasado a mí a veces. Como solemos hacer los jardineros, muchas de mis plantas suculentas las he repartido a media ciudad y parte del territorio español, porque me gusta dar esquejes a amigos y conocidos, sobre todo cuando sabes que es una planta hermosa y que va a resistir bien porque no es demandante en cuidados. Así he traído muchos esquejes también aquí, a la terraza de la radio.