"Gracias a todos los que me habéis odiado": así se construyó uno de los personajes más despreciables de la historia del cine

Madrid

Este año se cumplen 50 años del estreno de Alguien voló sobre el nido del cuco. Una película histórica, dirigida por Miloš Forman, que critica la autoridad y la opresión en los hospitales psiquiátricos. Todo ello a partir de la historia de Randle McMurphy, un preso que finge estar loco para evitar la cárcel y que acaba enfrentándose a algo mucho peor... la estricta enfermera Ratched. Y a pesar de que sea una película de ficción, muchos de los sucesos que tienen lugar durante la misma están estrechamente relacionados con las vivencias del escritor Ken Kesey, quien escribió la novela en la que está basada esta película.

Porque varios años antes de escribir esta novela, el escrito estadounidense participó como cobaya humana para un experimento de la CIA en el que descubrió qué había realmente detrás de estos hospitales. Un tema sobre el que hemos hablado en El Faro de la Cadena SER, donde Elio Castro nos ha explicado algunas de las curiosidades acerca de esta icónica película de Hollywood que cumple 50 años: "Kesey trabajó como enfermero en un hospital psiquiátrico y de allí sacó muchas de las cosas que se ven en la película". Pero lo más valioso que sacó de allí fue uno de los perfiles más icónicos de la novela. Hablamos sobre la enfermera Ratched, sin duda alguna uno de los personajes más odiados de la historia del cine.

"Tuvo que imponer su personalidad"

Según cuenta el director del Sucedió una noche, la enfermera Ratched está inspirada en la enfermera jefa de ese hospital en el que él trabajó Kesey. Y sí, era igual de mala que la que veríamos años más tarde en la gran pantalla. Todo ello gracias a la gran interpretación de la actriz Louis Fletcher, quien tuvo que llegar a hacer cosas inimaginables para mimetizarse con el personaje: "Realmente tuvo que imponer su personalidad dentro del rodaje porque tenía que hacer de un personaje realmente odioso".

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Y por si esto fuera poco, el director de la cinta le trataba todavía peor para sacar el auténtico espíritu de la enfermera Ratched: "Miloš Forman la trataba de forma dura para que tuviera un carácter bastante hosco". Por lo tanto, el director y la actriz trabajaron codo con codo para hacer de la enfermera un ser despreciable en todos los sentidos: "Durante el rodaje, la actriz decidió no llevarse del todo bien con el resto de actores para vivir un poco esa experiencia y que se plasmara luego en la película".

Una interpretación para la historia

Y la interpretación fue tan buena, que acabó recibiendo el premio Óscar a mejor actriz. Tras subir a recoger la estatuilla, y después de quitarse la losa que supuso interpretar a la enfermera Ratched, la actriz aprovechó su momento para dar las gracias a todas aquellas personas que le habían ayudado a llegar a lo más alto: "Muchas gracias a todos los que me habéis odiado porque, gracias a vosotros, estoy subida en este escenario". Y es que el papel de la enfermera era fundamental para la cinta porque representaba lo peor del sistema opresor.

Un personaje que fue odiado tanto por los espectadores como por la sociedad en general: "Al final hace que los internos se enfrenten un poco entre ellos y además tiene un comportamiento de duelo permanente con el personaje que hace Jack Nicholson". De ahí que, cuando la gente descubriera el final de su personaje, aplaudieran a rabiar: "Entonces, Louis Fletcher se dio cuenta de que su personaje había calado profundamente entre la audiencia".