Elvira Lindo: "Estamos preparando a los niños para el éxito y no para que sean buenas personas"

Madrid

En las últimas semanas, han salido noticias sobre universidades que se quejan de que los padres se ocupan de las cuestiones académicas de sus hijos, que ya son mayores de edad. El vicedecanato de Prácticas de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Granada colgó un cartel advirtiendo de que no atendía a padres, puesto que todo el alumnado matriculado tiene más de 18 años. Por su parte, la Universidad de Oviedo ha prohibido a los padres acceder a las notas y reclamar exámenes.

Una situación que a la escritora Elvira Lindo le da "muchísima vergüenza". Lindo hacía una comparativa entre su infancia y la infancia en la actualidad, y llegaba a la conclusión de que los padres de entonces "no te hacían ni caso". Para ella, la sobreprotección comienza en la niñez, después continúa en el instituto y si no se corta a tiempo llega hasta la universidad. Aunque el instituto y la universidad esté separado por un año, los universitarios son mayores de edad y, por tanto, ciudadanos. "Votan y deciden. Algunos van a votar a VOX y nos van a joder la vida", decía la escritora. De hecho, para ella "se prepara a los niños para el éxito y no para ser buenas personas".

La sobreprotección en las aulas

Carolina Rodríguez, doctora en Historia y Profesora Titular de Historia Contemporánea en la Universidad Complutense de Madrid, ha contado la experiencia que ha tenido en los últimos años con los padres de sus alumnos. La profesora ha tenido casos en los que "más madres que padres" han acompañado a sus hijos a revisiones de sus exámenes. "Me dijo que su hija no se expresaba bien y prefería hablar ella conmigo", decía la profesora sobre una madre.

Otra de las situaciones en las que más padres ha visto es a finales de junio, cuando se abre el plazo para que los alumnos puedan hacer sus matrículas. "Se formaban colas enormes en secretaría para entregar documentos y hacer papeleo", contaba la doctora en La Ventana.

La crianza a lo largo de los años

Para Elvira Lindo, "la generación de los ochenta es la más afortunada". Dice la escritora que los niños nacidos en esta década huían del autoritarismo. Pero esto no era solo una cosa de hijos, sino que las madres también buscaban su propia libertad. "Nosotras queríamos ser libres. Era una libertad doble", continuaba Lindo. Ahora la situación es muy diferente, terminaba, "a los hijos les va a costar independizarse de sus padres".