La UCO detecta que el empresario que financió a Alvise recaudó 261 millones a través de relojes, coches de lujo, casas, startups y oro
El informe del Departamento de Delincuencia Económica y Anticorrupción de la UCO detalla que Álvaro Romillo tenía en su poder criptomonedas por valor de más de 1,3 millones de euros provenientes de la estafa piramidal por la que ha sido arrestado. También guardaba relojes de alta gama y monedas de oro

La supuesta organización criminal liderada por Álvaro Romillo se sirvió de la entidad Madeira Invest Club para amasar su fortuna a través de una estafa piramidal con la recurría a nuevos inversores para cubrir las ganancias de los primeros participantes, sin que nunca llegasen a recibir la rentabilidad prometida.
El informe del Departamento de Delincuencia Económica y Anticorrupción de la UCO, al que ha tenido acceso la SER, detalla que el empresario que financió a Alvise Pérez con 100.000 euros en efectivo, engatusaba a las víctimas de su estafa piramidal con altísimas rentabilidades “llegando hasta el 68%”, a través de su ingreso en el ‘club privado de compradores de obras de arte digital’.
Romillo siempre recurría a la presión temporal bajo la fórmula de “ultimas plazas” para hacer más atractiva la urgencia de la inversión, para la que pedía un desembolso inicial de entre 1.000 y 2.000 euros, que daba acceso a la financiación para hacerse con obras de arte digitales.
La UCO acredita que Madeira Invest Club logró recaudar entre 5 y 7 millones de euros, a través de las tres fases de admisión que activó para nuevos miembros entre 2023 y 2024. Más de 3.000 personas picaron el anzuelo.
Madeira Invest Club amasó una poderosa fortuna. Logró recaudar 261.180.762 euros a través de la financiación que reclamó para hacerse con 44 inversiones, entre ellas, relojes de alta gama, coches de lujo, casas, startups, oro y metales preciosos.
Esta organización criminal contaba con una red compleja de 11 sociedades interpuestas, cuentas bancarias y activos de diferente naturaleza en distintas jurisdicciones repartidas por medio mundo, entre España, Portugal, Reino Unido, Albania, República Dominicana, EEUU, Malasia, Bélgica, Tailandia y Hong Kong, todo con “el ánimo de ocultación y apropiación de fondos y encaja con prácticas típicas de esquemas piramidales y de blanqueo: fragmentación de flujos, capas interpuestas y transferencia internacional de activos”.
Ese compleja estructura evidencia su "planificación y sofisticación del entramado societario, cuyo propósito no es solo la comisión de una estafa piramidal, sino también ocultar el origen ilícito de los fondos obtenidos”, apunta la UCO en su informe.
'Chiringuito financiero'
La CNMV incluyó a Madeira Invest Club en su lista de ‘Chiringuitos Financieros’ con una advertencia en la que alertaban de que no tenía autorización para realizar las actividades reservadas a las instituciones de inversión. El propio Romillo se mofó de aquella advertencia con carteles en los hacía una peineta a la CNMV. “Se han encontrado diversas publicaciones que confirman que Álvaro Romillo tenía conocimiento de que el MIC no estaba autorizado para llevar las actividades de inversión que estaba realizando, aunque esto no le supuso un obstáculo para continuar ofreciendo dichos servicios”.
Romillo recurría frecuentemente al uso de un pseudónimo – Luis – como un claro ejemplo del “ocultamiento deliberado de su identidad” que constituye “un indicio de la voluntad de confundir al inversor, facilitando la evasión de la responsabilidad y la dificultad de persecución penal”.
La UCO también ha detectado indicios sólidos de blanqueo de capitales, “que permiten suponer que la organización criminal cuenta con una estructura más amplia y jerarquizada, con ramificaciones aún por determinar, cuya dimensión excede a los hechos expuestos en el presente oficio, y que hacen necesario continuar con una investigación más profunda de los hechos”.
Álvaro Romillo ha sido arrestado este jueves por orden del titular del Juzgado de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, José Luis Calama, tras el alto riesgo de fuga detectado al conocer en este último informe de la UCO que este presunto ciberestafador tenía una cuenta en Singapur con 29 millones de euros procedente del dinero que recaudó a sus víctimas.
La UCO detalla que Romillo además tenía en su poder criptomonedas por valor de más de 1,3 millones de euros, relojes de alta gama por valor de 650.000 euros y monedas de oro, por un valor aproximado de 60.000 euros, todo proveniente, presuntamente, de su estafa.
A lo largo de la investigación se ha contado con la colaboración de EUROPOL y de cuerpos policiales de otros países, como el Homeland SecuritySI de EEUU la Singapore Police Force de Singapur, la Royal Malaysia Police de Malasia y la Royal Thai Police de Tailandia.




