Pole para Bezzecchi y caída de Álex Márquez en la clasificación del GP de Portugal

La clasificación del Gran Premio de Portugal fue un ejercicio de tensión, velocidad y golpes de efecto constantes. La Q1 dejó paso a dos protagonistas que supieron exprimir cada milímetro del trazado de Portimao: Fabio Quartararo y Jack Miller lograron el billete hacia la Q2, y junto a ellos se sumó un sólido Álex Márquez, que no tuvo mayores dificultades para hacerse un hueco entre los mejores.

Con el cronómetro ya activado en la sesión definitiva, los pilotos completaron su primera vuelta lanzada. Quartararo, todavía con la inercia positiva de la Q1, fue el primero en clavar una referencia seria: 1:38.518. Una vuelta limpia, agresiva y con la firma del campeón de 2021. Marco Bezzecchi respondió situándose a solo una décima y media, mientras el joven Pedro Acosta cerraba una primera línea provisional a más de tres décimas, sin perder el pulso a los veteranos.

Pero el golpe sobre la mesa llegó minutos más tarde. Álex Márquez, con decisión y ritmo, desató un brillante 1:38.098 que lo colocó al frente de la tabla. Bezzecchi y Acosta se mantuvieron pegados, a tan solo 27 y 92 milésimas. Todo estaba por decidir. Entonces llegó la pausa estratégica: siete minutos para reajustar pilotos, cambiar neumáticos y preparar el intento final. La calma antes del último asalto.

Álex Márquez se fue al suelo

Y ahí, Marco Bezzecchi apareció en estado puro. Voló sobre Portimao para detener el crono en 1:37 y arrebatar la primera posición. Mientras tanto, el giro dramático llegó en la curva 3: Álex Márquez se fue al suelo justo cuando buscaba recuperar la pole. La caída lo dejó sin opciones y cambió por completo el desenlace.

Con la bandera a cuadros ondeando, la parrilla quedó sentenciada: Pole para Marco Bezzecchi, seguido por Pedro Acosta, que se quedó a solo 150 milésimas, y Fabio Quartararo, que cerrará la primera fila. Álex Márquez partirá quinto, justo detrás de Pecco Bagnaia.

Para Bezzecchi, esta es su cuarta pole de la temporada, la primera en Portimao, una prueba más del extraordinario momento que vive. Su segunda mitad de curso está siendo sobresaliente, y la batalla por el tercer puesto del Mundial frente a Bagnaia promete un final cargado de emoción.