El dilema de una oyente a los idiotés, que mezcla familia, trabajo y un posible caso de abuso: "¡Qué horror!"
Los invitados debaten cuál sería la mejor opción en una situación muy complicada

El dilema de una oyente a los idiotés, que mezcla familia, trabajo y un posible caso de abuso: "¡Qué horror!"
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Madrid
En el último capítulo de La cena de los idiotés de Aimar Bretos han acudido a plantear sus dilemas la periodista Ángeles Caballero y los actores Miki Esparbé, Brays Efe y Julia de Castro. Pero, en esta ocasión, la situación hipotética que ha planteado la periodista es especial, porque la ha leído de una carta que le ha enviado una oyente.
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La autora de la carta es de Vigo y se llama Ana Fernández Ferreiro, a la que han hecho mención en el programa. El dilema consiste en que la hermana y el jefe de la protagonista tienen una relación sentimental, pero, con el tiempo, se detectan patrones que coinciden con una situación de maltrato. La protagonista aborda a su hermana como puede para preguntarle, apoyarle y animarle a denunciar a su pareja.
Esta, sin embargo, reacciona muy a la defensiva y responde con que se está metiendo en su vida, por lo que la pregunta que se les plantea a Bretos y los invitados es si denunciarían a la pareja de su hermana –y su jefe– aún sabiendo que no le va a parecer bien a la víctima y que es posible que pierda el trabajo.
La actriz Julia de Castro es la primera en responder y tiene claro que denunciaría, a pesar de que le distanciara de su hermana durante un periodo de tiempo. "No sabes con qué clase de psicópata te estás enfrentando, porque claramente no lo conoces, pero estaría en el acompañamiento, y eso supone a lo mejor años e, incluso, una década, pero estaría ahí", explica la actriz.
Respecto a la parte laboral, De Castro asegura que dejaría ese trabajo, porque no podría convivir con la persona que estaría maltratando a su hermana. "¿Con qué cara miro yo a esa persona? Es que no podría ni convivir en una habitación", asegura la actriz.
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"¿A qué hay que esperar exactamente?"
Miki Esparbé coincide con De Castro y también denunciaría. El actor explica que se informaría de mecanismos de acercamiento para hacerle ver a su hermana la situación en la que está. "Me asesoraría con profesionales que supieran cómo hacerlo y de qué manera, por mucho que me doliera", explica. Esparbé, además, también dejaría ese trabajo "sin ninguna duda".
Brays Efe, por su parte, comenta que ha vivido en una casa en la que había una situación de violencia de género y que considera muy importante y "valioso" el acompañamiento a la víctima, pero asegura que "hay que llamar a la policía".
Sobre el agresor afirma que "puede ser una persona monstruosa y terrible", por lo que se cuestiona "a qué hay que esperar exactamente". El actor destaca la importancia que él daría en esa situación a la ayuda de un profesional para la víctima de maltrato.
Los actores y la actriz debaten sobre cuál sería la mejor opción, aunque les es imposible decidirse por la dificultad de la situación. De Castro comenta un caso personal en el que la denunciante se vio en una situación peor al acudir a la policía y Efe afirma que es cierto que "la policía no es infalible".
La periodista Ángeles Caballero también se inclina por ir a denunciar, a parte de estar al lado de la víctima. Explica que iría a comisaría a pedir ayuda para poder sacar a esa persona de esa situación, sin decírselo a ella, puesto que esta podría decírselo a su maltratador y empeorarlo todo.
Finalmente, Bretos recuerda a los espectadores y oyentes el teléfono al que deben acudir las víctimas en estos casos para asesorarse, que es el 016. Es un número totalmente gratuito y que no deja rastro en la factura telefónica, aunque debe borrarse de la lista de llamadas en el teléfono móvil.




