Mazón multiplica la ira
Así: el problema no se acaba con el personaje tóxico de Mazón. Alcanza a todos los corresponsables

Madrid
No nos olvidemos de las víctimas. Porque es un deber de decencia y solidaridad. Pero también porque son, en el caso de la dana valenciana, unos protagonistas públicos de primera fila, de gran influencia y con gran capacidad de orientar la reflexión.
Mientras el debate público se centra en el candidato a suceder a Carlos Mazón, en la discusión entre partidos, en cuál sería su programa, ellas, las víctimas, dan en el clavo. Fueron ayer otra vez humilladas por el presidente cesante, impidiéndoles la entrada, por falta de espacio, a la ridícula sesión parlamentaria de supuesta investigación en Les Corts valencianas.
Como esta censura de su presencia, que multiplica su ira, no se sostiene; como se suma a las humillaciones que llevan sufriendo durante un año, los familiares de las víctimas, víctimas ellas y ellos también, han llegado a la conclusión acertada, y la han explicado hoy en Valencia, en Bruselas, en Madrid. Así: el problema no se acaba con el personaje tóxico de Mazón. Alcanza a todos los corresponsables. Todos tiene que asumir sus fallos, negligencias y desprecios. El candidato a sucederle, porque era su hombre de confianza y todos los miembros del Gobierno autonómico que tanto erró. Quien les ha protegido desde la cúpula del PP. Y sus aliados de ultraderecha. En el fondo, la pasividad ante la dana fue efecto del negacionismo climático de ambos partidos, que anuló su percepción de peligro.
No resolverán las próximas crisis de este tipo quienes niegan sus causas. Es un razonamiento evidente. Pero también abrumador, ¿no les parece?

Xavier Vidal-Folch
Periodista de 'EL PAÍS' donde firma columnas y colaborador habitual de la Cadena SER, donde publica...




