Fútbol

Nueva polémica con el Estadio de Vallecas: "Es un trastorno y una falta de respeto"

La Real Federación Española de Fútbol ha emitido una resolución en la que aclara dónde se jugará el partido entre el Rayo Vallecano B y el RSD Alcalá SAD

Imagen a pie de campo del Estadio de Vallecas / Angel Martinez

Esta vez, la polémica ha salpicado al Rayo Vallecano B, cuyo partido ante el RSD Alcalá ha estado rodeado de incertidumbre por el lamentable estado de las instalaciones del club madrileño.

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La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha emitido este miércoles 12 de noviembre una resolución que ha zanjado la situación: el duelo correspondiente a la quinta jornada del grupo 5 de Segunda Federación se jugará finalmente en el Campo Municipal Virgen de la Torre, y no en el Estadio de Vallecas, como estaba previsto. La decisión fue firmada por el Juez Único de Competiciones No Profesionales, Rafael Alonso Martínez, quien dejó constancia de que la medida se adoptaba para "evitar una nueva suspensión del encuentro".

"Agujeros, calvas y césped levantado"

El conflicto se remonta al 30 de septiembre, cuando una inspección técnica de la RFEF en los campos 3 y 4 de la Ciudad Deportiva del Rayo reveló "agujeros, calvas y levantamientos del césped", además de irregularidades que "comprometían la estabilidad de la pisada y la integridad de la competición". Ante tal diagnóstico, la Federación prohibió celebrar partidos oficiales en esas instalaciones hasta su completa reparación.

Una nueva revisión, el 3 de octubre, apenas encontró avances: el campo 4 mostraba ligeras mejoras, pero el campo 3 seguía impracticable. Ante la imposibilidad de disponer de un terreno de juego seguro, el encuentro entre el Rayo B y el Alcalá, previsto para el 5 de octubre, tuvo que ser aplazado. Días más tarde, el 7 de octubre, la RFEF fijó nueva fecha -12 de noviembre a las 20:00 horas- y decidió que se jugara en el Estadio de Vallecas, considerando que era la instalación que mejor reunía las condiciones de seguridad.

Sin embargo, el día anterior al partido, el Rayo Vallecano solicitó un cambio urgente de sede. Según alegó el club, tras ver reflejado en la plataforma oficial Novanet que el filial disputaría sus encuentros en el Campo Municipal Virgen de la Torre, se habían iniciado labores de resiembra en Vallecas, contratadas a la empresa Royalverd Service SLU. Además, el dispositivo de seguridad y asistencia médica ya estaba organizado en el nuevo campo, mientras que el estadio principal no contaba con personal operativo ni medidas activadas para abrir al público.

El club defendió haber actuado "de buena fe", convencido de que la Federación había validado el cambio, aunque el juez único subrayó que no existía ninguna resolución oficial que modificara la del 7 de octubre. Aun así, y ante la posibilidad de otro aplazamiento, la RFEF aceptó la solicitud para garantizar que el encuentro se disputara sin más incidentes.

"Nos sentimos muy desprotegidos"

No obstante, la propia resolución advierte que la situación fue "creada por el propio club local" al iniciar obras sin autorización y dejar inhabilitado su estadio. Por ello, el caso se ha remitido al Juez Disciplinario Único, que deberá valorar si el Rayo incurrió en una infracción disciplinaria, especialmente por la "prolongada y simultánea falta de disponibilidad de los campos principal y alternativo", algo que podría interpretarse como un incumplimiento de los requisitos de participación en la competición.

Ante esta situación, el Alcalá ha emitido un comunicado oficial transmitiendo su malestar: "Desde la R.S.D. Alcalá queremos trasladar nuestra máxima indignación, impotencia y pedimos respeto ante los hechos acaecidos en las últimas 24 horas con respecto a la ubicación del partido que nos tiene que enfrentar al filial del Rayo Vallecano".

El tono, en el tramo final del escrito, ha sido de queja y absoluta perplejidad ante los hechos que se han ido produciendo en las últimas horas: "Nos sentimos completamente desprotegidos, pues a menos de 10 horas para la disputa del partido nos han vuelto a cambiar las condiciones básicas del mismo, un trastorno y una falta de respeto a un club centenario y a sus aficionados".

Tanto el Rayo Vallecano como el RSD Alcalá disponen de 48 horas para recurrir ante el Comité Nacional de Segunda Instancia. En definitiva, la RFEF optó por la vía más práctica: permitir la disputa del partido y garantizar el desarrollo de la competición, aunque sin cerrar la puerta a posibles sanciones por la caótica gestión del club vallecano en sus instalaciones.

Marcos Gómez-Díaz

Periodista deportivo en la Cadena SER, con una...