La gran diferencia entre los viajes actuales y los de la Edad Media: "La gente no esperaba volver viva a casa"
Anthony Bale explica esta notable distinción en 'SER Historia"

SER Historia | La gran diferencia entre los viajes actuales y los de la Edad Media: "La gente no esperaba volver viva a casa"
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Actualmente, viajar es de las cosas más comunes para la sociedad. Ya sea por vacaciones, trabajo o motivos familiares, viajar está a la orden del día para la mayoría de las personas.
Sin embargo, no siempre se ha hecho y se ha visto de la misma manera. Un ejemplo de ello es la Edad Media.
Una notable distinción es que, durante la Edad Media, los viajes eran muy inseguros por la falta de protección, la poca confianza en los medios de transporte y la carencia de instalaciones adecuadas. A diferencia de los viajes de hoy, que son mucho más seguros debido a la tecnología y a las infraestructuras modernas. Esto hace que la posibilidad de no regresar sea un riesgo muy mínimo.
Pero, según explica en SER Historia Anthony Bale, autor de Guía de viajes por la Edad Media, la principal diferencia se encontraba en que "la gente no esperaba necesariamente volver vivo a casa".
Por este motivo, "pedían antes de partir de viaje permiso al obispo, arreglaban sus asuntos y hacían nuevos testamentos porque pensaban que a lo mejor podían morir allí en el trayecto", asegura Bale.
"Al final, cuando se está en el barco o cuando se está en camino, pueden ocurrir diversas situaciones. Pueden ocurrir situaciones de que falte dinero, problemas de salud, de higiene, etc.", sentencia el autor de Guía de viajes por la Edad Media.

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