Aitana Bonmatí alza la voz por el fútbol femenino: "Cuando era niña, mis ídolos eran hombres. ¿Por qué ahora no va a ser al revés?"
La tres veces Balón de Oro pide más apoyo institucional en 'El Larguero'
Este viernes se disputa en el partido de ida de la final de la Nations League. Será en el Fritz-Walter Stadion de Kaiserslautern. La vuelta, el próximo 2 de diciembre, en el Metropolitano. El rival es Alemania, una selección a la que no habíamos ganado nunca hasta este verano. Fue en las semifinales de la pasada Eurocopa y gracias a un gol de pilla de Aitana Bonmatí. Cuando todo el mundo, incluida la portera Berger, esperaba un centro lateral, la mediocampista puso la pelota al palo corto para meter a España en la gran final.
"Lo escucho y todavía siento ese gusanillo. Fue muy especial. La celebración lo dice todo. No sabía donde ir, luego me fui al banquillo… Eso te queda para toda la vida. Fue un proceso difícil porque antes de la Eurocopa, de un día para otro, me vi en un hospital", recuerda con Manu Carreño en El Larguero. Sufrió una meningitis vírica e incluso se especuló con que se perdería la cita. "Hubo mucha especulación. Cada caso es único. No tenía una meningitis bacteriana, era vírica. Mi proceso fue rápido y estuve bien en nada. Es cierto que en algún momento me costó verme. Luego... yo forcé bastante. Bueno, no forzar, pero es que me sentía bien. Apreté para decirles que estaba preparada", añade.
En la final no se pudo con Inglaterra. Esta vez será Alemania la que esté enfrente y en un formato que no convence a la tres veces ganadora del Balón de Oro. "Hemos jugado muchas veces en contra, a nivel de selecciones y de clubes. Es un partidazo. Rival muy difícil. Son muy completas y un equipo muy físico. Vamos a ver cómo va esto de una final a dos partidos. Es un poco raro. A mí me gusta más jugar las finales a un partido. Se vive más como una final (…) Nosotras nunca especulamos, sea a uno, dos o cuatro partidos. Cuando lo haces, te equivocas. Hay que poner la vista a corto plazo e intentar incluso sentenciar si se puede. Aunque con el rival que tenemos enfrente, será complicado", explica en El Larguero.
Pese a estar un poco resfriada —y arrastrar unas molestias físicas—, Aitana Bonmatí tiene claro que podrá estar a disposición de Sonia Bermúdez para el partido. "Este último mes vengo arrastrando una molestia en el tendón del isquio izquierdo que me impide estar al 100%. Estas lesiones no te impiden jugar, pero no juegas cómoda. Quitando esto, me veo bien, sí", responde al ser preguntada si atraviesa su mejor momento como futbolista. Eso sí, no quiere ni oír hablar de otro Balón de Oro.
"¿El cuarto? Ya veremos, ya veremos. Mejor no te digo donde tengo los otros tres, que se van a reír de mí. Están en su caja, pero no voy a decirte donde. No me gusta verlos cada día. Tengo un proyecto en mente que es compartirlo con la gente. Mi pueblo está mirando para hacer un museo para representar toda mi carrera, no solo a nivel de títulos o reconocimientos, sino más general. Algo abierto al pueblo, al público, y que si vienen a mi pueblo puedan verlo (…) Me gusta compartir las cosas. Yo ya sé lo que he ganado, lo que he vivido", desvela la internacional antes de reflexionar sobre la salud del fútbol —y el deporte— femenino en España.
Aitana alza la voz por el fútbol femenino
"Me gusta destacar que nosotras podemos ser ejemplo para niños y niñas, pero sobre todo en niños. Yo, cuando era pequeña, mis ídolos eran hombres. ¿Por qué ahora no va a ser al revés? Ahora vas a los campos y ves niños que te reconocen y te hace ilusión. Yo hace años no pensaba que esto sería posible. Creo que ayuda mucho a la igualdad. Cuando eres niño y creces con la idea de que las mujeres pueden ser referentes en el deporte, cuando eres mayor tienes una mayor conciencia de igualdad. Los niños, cuando son pequeños, no tienen prejuicios. Se los ponemos los adultos", destaca sobre cómo su imagen puede ayudar al desarrollo de su deporte.
Sin embargo, insiste en la idea de que es necesario más apoyo institucional. "Las instituciones tienen que hacer una apuesta real por el fútbol femenino. Hace poco hice una entrevista con Elle y dije que el fútbol masculino también empezó de cero. Sin nada, siendo puramente un juego de entretenimiento sin sponsors, dinero ni nada. Alguien creyó que era una fuente importante de monetización y apostó. Por eso yo pido lo mismo ahora", reitera Bonmatí, que pone en valor el papel de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). "Ahora en la RFEF nos sentimos contentas y valoradas. Después de todo lo que hemos pasado, se agradece venir aquí y sentirte futbolista (...) Antes cada entrevista te la tenías que preparar, a ver qué polémica me van a sacar hoy. Se agradece venir a una entrevista y no estar pensando en las polémicas. Es verdad que quizá, en ese momento, se tenía que hablar de ello. Ahora está todo en orden, estamos muy contentas, tranquilas. Se han hecho los cambios que demandábamos y aquí la gente está muy bien", celebra. Sobre Rubiales, y su libro, prefiere no mojarse. "¿Su libro? El viernes hay partido. El viernes, partido (risas)", bromea.
Menos clara ve la situación en la Liga F. "Está un poco dejada de la mano de Dios. No sé a quién le importa exactamente. Muchas hemos alzado la voz y hemos pedido cambios, una liga más competitiva. Va a ser mejor para todos y todas: jugadoras, equipos, para el producto, los aficionados… pero no sé qué pasa ahí. Tenemos el ejemplo de Inglaterra, que tienen una liga competitiva y atractiva. Tenemos ejemplo al lado y no queremos mirarlo. No lo entiendo. No se favorece el producto español, y es muy bueno", lamenta.
"¿Cuántas veces he dicho esto ya? Me habéis escuchado más de 10 veces. Hemos pedido cambios en la liga. Hemos pedido ser menos equipos, porque creemos que la liga sería más competitiva y subiría el nivel. También sería más atractiva y bonita de ver. Y luego está el calendario. Las jugadoras que jugamos la liga en España somos las que más partidos jugamos del mundo. Siempre estamos con una diferencia de condiciones respecto a otras ligas. Nosotras nos estamos jugando Champions, o el Real Madrid, y vamos con más carga de partidos. Tampoco esto favorece a que estemos a nuestro mejor nivel. Y esto también afecta a la Selección. Luego llevas al torneo de verano de turno y otras jugadoras de otros países llegan con más descanso", añade.
¿Directiva o comentarista en el futuro?
Tras esta demanda, la pregunta es si ella se ve en el futuro en un cargo directivo capaz de poner solución a estos problemas. "Ya veremos. Me gustan los cargos importantes. Creo que tengo esa personalidad y esas ganas de hacer cambios. Más que de ser entrenadora. Ya veremos. En el futuro me gustaría hacer algo que me llene y para eso me tiene que motivar. Hay poco más motivante que poder ejercer cambios desde tu puesto y ayudar a que algo funcione mejor", apunta.
De momento sus próximos retos fuera del verde son su Campus —este año se expande a Estados Unidos— y comentar el Mundial masculino en Televisa. "Cuando me lo propusieron, pensé que era una manera de salir de mi zona de confort. Tengo 27 años, me queda mucho para retirarme, pero es una forma para prepararme para el futuro. Me hace ilusión, es verme en otro escenario y hablando de fútbol, que también me gusta. Tengo que hacer un trabajo de aprender de los mejores y las mejores antes. Tendré que ponerme a estudiar el grupo de España", sentencia.
Aitana Bonmatí alza la voz por el fútbol femenino: "Cuando era niña, mis ídolos eran hombres. ¿Por qué ahora no va a ser al revés?"
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