Despidos en cadena

Madrid

Internet llegó a nuestras vidas cotidianas en la década de los noventa del siglo pasado. Todavía hay jubilados que vieron pasar de refilón la digitalización en su etapa activa, aunque luego se hayan integrado en ella queriendo o no queriendo.

Los milennials y los centennials no conciben cómo sus padres y sus abuelos podían trabajar en un mundo analógico, rodeados de papeles.Hasta ahora sabíamos que pese a todo lo que se había avanzado permanecíamos en la etapa de adolescencia de internet.

De repente ha llegado entre nosotros la inteligencia artificial, que puede realizar tareas que al menos aparentemente requieren de la inteligencia humana. Aunque en realidad no fue de repente sino que convivíamos con ella cada vez más sin darnos cuenta, y ha penetrado como un tifón en nuestras vidas.

En este tiempo nos toca hacer balance todos los días sobre los efectos positivos y negativos de la inteligencia artificial. Por ejemplo, en la interpretación del trabajo como forma de vivir.

Mientras administramos esas reflexiones, las grandes compañías tecnológicas como Amazon, Meta, Apple, HP (y aquí en España, Telefónica, aunque también por otros motivos) han iniciado una cadena de despidos por la introducción de herramientas vinculadas a la inteligencia artificial.

Así que por un lado la utilizamos, y por el otro nos resulta profundamente antipática.