Golpe policial a 'The Base', el grupo supremacista que se preparaba para desatar una "guerra racial en España"

Madrid

Hace solo un mes, el fundador de The Base, Rinaldo Nazzaro, de 46 años, bajo los alias de Norman Spear y Roman Wolf, realizó un llamamiento para la consolidación de las células de su banda expandidas a nivel internacional, pero pidió algo más, la ejecución de ataques selectivos con el fin de colapsar las instituciones democráticas occidentales. Aquel mensaje también tenía un receptor en España, en concreto, Castellón, donde se ha localizado la primera célula de esta organización neonazi.

The Base es un grupo extremista neonazi manejado desde Rusia que busca "incitar una guerra racial" en EEUU. Se creó en 2018, a través de la expansión de células paramilitares que se adiestran en campos de entrenamiento para perpetrar atentados con el objetivo de una supremacía blanca, de hecho, este grupo está considerado como una organización terrorista en la Unión Europea, Canadá, Reino Unido, Australia y Nueva Zelanda.

La Policía Nacional ha desarticulado la primera célula de esta organización en España. Los agentes de la Comisaría General de Información han detenido en la provincia de Castellón a tres personas relacionadas, presuntamente, con The Base.

El líder de la célula ha ingresado en prisión por orden del titular del Juzgado Juzgado Central de Instrucción número seis de la Audiencia Nacional. Se les acusa de los delitos de pertenencia a organización terrorista y captación, adoctrinamiento y adiestramiento con fines terroristas, así como de tenencia ilícita de armas.

La investigación comenzó a principios de 2025 cuando agentes especializados en la lucha contra el terrorismo y el radicalismo detectaron a un individuo muy radicalizado y alineado con los postulados terroristas supremacistas de la organización denominada The Base. El principal detenido, el líder de esta célula española, estaba en contacto directo con el fundador de The Base.

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Una célula cohesionada

Durante la investigación se descubrió la existencia de una célula cohesionada, integrada por otras dos personas más, cuyos integrantes se encontraban altamente radicalizados, basando su estilo de vida en los postulados de la organización terrorista, y en disposición de realizar atentados. Según ha informado la Policía, incluso habían realizado ya varios entrenamientos tácticos utilizando técnicas y material paramilitar.

Los agentes también pudieron comprobar cómo los detenidos utilizaban las redes sociales para reclutar nuevos militantes, enaltecer acciones violentas de otras organizaciones terroristas y compartir con otros usuarios contenido audiovisual de carácter supremacista.

En los últimos meses, los detenidos habían endurecido su discurso radical, alentando a llevar a cabo acciones violentas, llegando incluso a manifestar abiertamente, que estaban dispuestos a realizar ataques selectivos para la causa. Fuentes de la investigación han confirmado a la SER que estos criminales tenían planeado atentar contra políticos, agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, miembros de la comunidad judía y musulmana, inmigrantes, grupos antifascistas y colectivo LGTBI.

Durante los cincos registros practicados en la provincia de Castellón han sido intervenidas nueve armas, dos de ellas de fuego, munición, más de una veintena de armas blancas, un completo equipamiento táctico militar que utilizaban en las actividades de capacitación, material y documentación de carácter aceleracionista y supremacista, propaganda de la organización The Base, parafernalia neonazi así documentación ensalzando otras organizaciones terroristas.