El primer fotógrafo español que entendió la gloria del "postureo real" y siguió con su cámara a la reina Isabel II

Madrid

En La historia en ruta, de David Botello y Esther Sánchez quisieron homenajear la ciudad de Valencia con el cumplimiento del aniversario de la DANA que sacudió la ciudad y se cobró la vida de 230 personas. Junto a ellos, habla de esta ciudad española la periodista Ainara Ariztoy.

La reina Isabel II visitó Valencia en el año 1858, en una de esas giras borbónicas con arcos triunfales, carrozas, confeti y media España gritando "¡Guapa!". Aunque el viaje no fue un camino de rosas, ya que el trayecto entre Alicante y Valencia fue complicado debido al temporal marítimo que hubo, pero, a pesar de esto, siguieron su camino.

Allí, en Valencia, recibieron a la reina con flores, música y luces por todas partes, sin embargo, no volvió jamás, pero dejó huella en esta ciudad, que le puso su nombre a su plaza más céntrica.

Este viaje estuvo motivado por aspectos ferroviarios: la inauguración de la línea de tren que conectaba Madrid con Alicante. Pero, en este recorrido por el Levante, hubo otro nombre que tuvo gran importancia –y que no pertenecía a la realeza– y fue el de José Martínez Sánchez, pionero de la fotografía española.

Sorolla también se desarrolló en la fotografía

Martínez fue el primero que entendió que el postureo real podía hacer historia y decidió inmortalizar el viaje de la reina Isabel II, haciendo el primer reportaje secuencial de la historia de España. Este histórico fotógrafo contó con varias personas para ayudarle y, entre ellas, estaba un joven aprendiz, llamado Antonio García Peris.

Este aprendiz se encargó de hacer el photoshop de estas fotos, pero a la manera que podía hacerse en aquel entonces y, años después, montó su propio estudio y contó con el pintor Joaquín Sorolla, que también se desarrolló en el campo de la fotografía, a parte de en el de la pintura.

Con todo este despliegue de figuras de renombre en distintos aspectos artísticos, la visita de Isabel II puso en marcha la primera telenovela fotográfica del país, reuniendo cámaras, pinceles y gente con talento.