Millás revela cómo se enfrenta este año a la Navidad: "La gente necesita moverse"
El escritor asegura que para afrontar estas navidades tendrá que tirar de "fuerzas del pasado"

El escritor español, Juan José Millás, se prepara para vivir estas fiestas navideñas "con determinación"

Madrid
Comienza la época navideña, las luces y decoraciones ya inundan cada rincón de las ciudades, se respira un ambiente con aromas de felicidad, turrón y mazapanes, pero no todo es luz y alegría en la navidad. Esta etapa del año viene también ligada a los viajes, las grandes multitudes que entorpecen el camino por las calles y los negocios abarrotados de personas desesperadas por terminar todas sus compras antes de las fechas señaladas.
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Esta es la idea que se le viene a la cabeza al escritor Juan José Millás cuando piensa en la navidad, una etapa de estrés y agobio que debe ser superada para llegar lo mejor posible al mes de febrero. "Con determinación", así es como pretende enfrentar Millás estas fiestas navideñas.
Calles abarrotadas
Uno de los aspectos de las fiestas que más agobia al escritor es lo difícil que se hace poder pasear de forma tranquila por las calles del centro de la ciudad. La llegada de la ilusión navideña anima a la gente a hacer planes en el exterior, observar el decorado de los diferentes barrios, o disfrutar de una bebida caliente bajo la fría noche de diciembre. Pero todos estos planes, por muy bonitos que parezcan, terminan derivando en calles abarrotadas por las que casi no se puede andar sin estar chocándose de forma constante.
Es cierto que lo lógico sería pensar que, ciudades tan grandes como Madrid, se vacían durante esta época del año porque sus ciudadanos prefieren aprovechar estos días festivos para hacer alguna escapada, pero claro, Millás nos recuerda un aspecto básico que rompe con esta hipótesis. "Tanta gente como se ha ido de Madrid también ha venido, porque a Madrid viene mucha gente" explica el escritor.
Enfrentar la navidad "con dureza de cowboy"
Llegados a este punto, Juan José Millás solo aspira a tener una navidad tranquila y feliz en la que consiga estar "bien físicamente y emocionalmente", aunque reconoce que para conseguir su objetivo tendrá que hacer frente a "un tercio del cuerpo emocional, que está deprimido". Solo existe una opción para superar este bache navideño, tirar de "fuerzas del pasado" y vivir estas fiestas "con dureza de cowboy".




