Del "cállate, cerdita" al "presentadora de bajo nivel"

Madrid

Los periodistas de la tele y radio pública británica pasan malos momentos. Hace poco hubo un ataque directo de la Casa Blanca a la BBC que le costó el puesto a dos administradores de la tele inglesa. Ahora son directamente los políticos británicos de extrema derecha los que parecen estar más cerca de destinarles insultos claros y directos.

Todo empezó hace meses con el presidente Donald Trump, que no tuvo mucho problema en decirle a una periodista de la ABC News, “cállate, cerdita”. Claro que a otra la volvió a mandar a la escuela de periodismo y a otra le dijo que le estaba haciendo daño a su país, Australia, con esa manía de preguntarle por los papeles del pederasta Epstein.

Ahora la moda ha llegado al Reino Unido y ha sido Nigel Farage, el líder del partido Reforma, de extrema derecha, el que se ha metido con una periodista de la BBC, Emma Barnett, a la que llamó “presentadora de bajo nivel“ y de hacer preguntas despreciables y repugnantes, por recordarle que compañeros suyos de la escuela todavía se sabían algunos de sus chistes racistas y antisemitas. Por lo que se ve, a Farage le hacia mucha gracia un antiguo presentador de la BBC que en los años 50 que se reía con chistes sobre Hitler.