Manuel Jabois: "Los sucesos pasan muchas veces como el mar, arrasándolo todo y dejando unos números sin historias"

Madrid

Cada ola, cada marea, que se lleva estas vidas se lleva también la historia que tienen detrás. Es lógico poner el acento en la imprudencia, es natural insistir: hagan caso de las autoridades, si algo no está precintado no lo salten porque detrás está un océano vivo, asesino, impredecible. Y sin embargo qué duro es sospechar las vidas que había detrás de esas personas: el día que pasaron sin saber cuál es el último, sus familias, sus sueños, sus frustraciones.

Eran todos turistas, parece ser. Dos de ellos podrían ser extranjeros. No se han conocido sus nombres, a duras penas sus edades, no sabemos el quién ni el por qué, sí el cómo y el cuándo porque esta es una noticia de sucesos, y los sucesos pasan muchas veces como el mar, arrasándolo todo y dejando unos números sin historias. Que son, al fin y al cabo, las que nos dan sentido.