Del "échanos a todos" de Vinicius al "p*** idiota" de Bellingham: el cabreo del Real Madrid con el arbitraje ante el Celta

El Real Madrid sufrió una dura derrota frente al Celta de Vigo en el Santiago Bernabéu por 0-2 gracias a un doblete de Williot Swedberg. Con este resultado, el combinado blanco acumula cuatro partidos consecutivos sin conocer la victoria después de enlazar tres empates seguidos (Rayo Vallecano, Elche y Girona) y una derrota, la de la última jornada frente al Celta de Vigo. Fruto de ello, el club ha perdido el liderato de LaLiga en detrimento de un FC Barcelona que ya le aventaja en cuatro puntos en la parte más alta de la clasificación.

En el partido, el Real Madrid terminó con 9 futbolistas después de las expulsiones de Fran García por doble amarilla y de Álvaro Carreras por una roja directa. Además, Endrick, en el banquillo, también fue expulsado en el descuento de un partido en donde el conjunto dirigido por Xabi Alonso terminó desquiciado. Así lo captaron las cámaras de Movistar y de DAZN durante el momento en el que Carreras y Endrick fueron expulsados con roja directa.

Vinicius, muy enfadado con la actuación arbitral en el Santiago Bernabéu, se fue a la banda mientras gritaba: "Más, más. Saca más. Más rojas. Echa a todos, échanos a todos". Además, Jude Bellingham, mientras se iba del terreno de juego, le gritó al cuarto árbitro en inglés "p*** idiota" en repetidas ocasiones. Franco Mastantuono, consciente de lo que su compañero le estaba diciendo, se fue rápidamente a por él para quitarlo de la imagen y que se pudiera enfrentar a una sanción disciplinaria.

Los jugadores del Real Madrid acabaron mostrando desesperación ante el Celta con el arbitraje. Así fue expulsado en apenas un minuto Fran García. El tiempo que separó a dos entradas por detrás a rivales ante la incredulidad de Xabi Alonso en la banda que le gritó un clarísimo: "Fran, no me jodas". Además, el madridismo también quedó muy molesto por una cartulina amarilla a Jude Bellingham por entrar sin permiso al terreno de juego tras recibir un codazo de Borja Iglesias, el cual no fue castigado, y que terminó con sangre en la cara del futbolista inglés.

El enfado acabó provocando, además, las expulsiones de Álvaro Carreras, por decir al árbitro que es "muy malo", e incluso de Endrick, frustrado por la falta de minutos en el banquillo, por su protesta airada al cuarto árbitro. También amarillas por protestas airadas de Rodrygo y Fede Valverde. Hasta a Xabi Alonso, que posteriormente se quejó del arbitraje en rueda de prensa tras ver que el paso al frente dado en San Mamés fue un espejismo en un equipo alejado del que tenía en mente.