Probamos el 'Dragon Ball: Sparking! Zero': a Goku y compañía les sienta bien el salto a la Nintendo Switch 2

Madrid

Hace algo más de un año, concretamente en octubre de 2024, Bandai Namco Entertainment publicaba Dragon Ball: Sparking! Zero en PlayStation 5, Xbox Series X/S y Windows. Un videojuego de lucha en 3D, secuela directa del icónico Budokai Tenkaichi 3, en el que pudimos revivir la historia original del manga de Akira Toriyama a través de sus distintos personajes. Porque en este juego no solo controlamos a Goku, sino que también podemos jugar con un total de 182 personajes en los escenarios más icónicos de la historia. Desde algunos que le acompañaron desde su primera aventura, como es el caso de Krilin, hasta otros de reciente creación como el monstruoso Jiren.

Y fue un éxito rotundo. En sus primeras 24 horas en el mercado vendió más de tres millones de copias en todo el mundo, rompiendo así todos los récords de la franquicia. Pero no solo eso. Por si esto fuera poco, en su semana de lanzamiento llegó a superar los 122.000 jugadores simultáneos en PC, una cifra increíble si lo comparamos con otros juegos de lucha como el Street Fighter 6 o el Tekken 8 en sus respectivos estrenos. A pesar de su éxito, el videojuego nunca llegó a la Nintendo Switch por las limitaciones gráficas de la consola. Pero ahora que Nintendo ha sacado la Switch 2, la compañía nipona ha sorprendido con una versión para la consola portátil sobre la que te hablamos a continuación:

Un gran paso adelante en el campo de las consolas portátiles

Una de las cosas que más nos ha llamado la atención de esta nueva versión del Dragon Ball: Sparking! Zero desde el momento en el que instalamos el juego es que corre bajo Unreal Engine 5. Un motor, que hasta hace no mucho tiempo parecía impensable en una máquina de Nintendo, que nos permite disfrutar de una experiencia similar a la que podríamos recibir en cualquiera de las otras consolas en las que podemos jugar a este videojuego. Porque no, esta versión del Dragon Ball: Sparking! Zero para la Nintendo Switch 2 no es una versión móvil recortada al estilo de lo que veíamos antaño. Es un juego adaptado a esta videoconsola de principio a fin.

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Algo que se aprecia desde que comenzamos el modo historia y empezamos a zurrarnos contra nuestros primeros adversarios. Principalmente porque la ropa de los personajes se va rasgando a medida que va recibiendo golpes o porque emanan todo tipo de rayos y energías por nuestro cuerpo, demostrando así que está un paso por delante de todo lo que habíamos visto hasta la fecha en Nintendo Switch. Por lo tanto, el videojuego nos ofrece una experiencia de juego que hasta hace no mucho tiempo parecía imposible en una videoconsola portátil. Eso sí, una experiencia que se paga en términos de batería, pues tan solo podrás jugar unas tres horas y media con brillo medio antes de tener que pasar por el enchufe de nuevo. Así que, si te vas a ir de viaje, no te olvides del cargador.

Pero hay una gran diferencia entre jugar a este videojuego en una PS5 o una Xbox Series que hacerlo en la Nintendo Switch 2. Mientras que en las dos primeras podemos jugar a 60 frames por segundo, la versión de la Nintendo Switch 2 está capada a 30 FPS. Si eres de los que vienen desde la Switch original probablemente ni lo notes pero si, por el contrario, vienes de las consolas de sobremesa que te hemos citado, probablemente notarás que la jugabilidad es algo más lenta. Y esto, al ser un título tan frenético, se nota. Especialmente si eres de los que juega al modo online, donde cada milésima cuenta para ganar un combate.

Revive tus capítulos favoritos...

Dejando a un lado el tema de los FPS, la experiencia visual del Dragon Ball: Sparking! Zero supera por completo nuestras expectativas tanto en el modo portátil (donde podremos disfrutar de una experiencia a 810p) como en el televisor (donde se realiza un escalado a 4K por la consola). Sí que es cierto que hubo una ocasión en la que notamos un bajón a nivel gráfico, concretamente durante una conversación entre Gohan y Piccolo, pero fue algo muy puntual. Por norma general, los personajes están muy bien moldeados, así como los distintos escenarios sobre los que nos enfrentamos a los distintos villanos. Pero no solo eso.

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Gracias al HDR, activado por defecto, los colores de los distintos personajes, así como de sus ataques principales, son mucho más intensos que los de la Nintendo Switch original o incluso la versión OLED. De ahí que los combates sean muy parecidos a aquellos con los que disfrutábamos cuando éramos pequeños. Seguimos sin poder hacer la traslación instantánea de Goku, tampoco podemos fusionarnos con la Danza de la Fusión, pero al menos podemos pedirle a nuestros personajes que interpreten cada uno de estos movimientos como si fuéramos el mismísimo Toriyama.

Por lo tanto, y más allá de ese bajón puntual a nivel gráfico, el Dragon Ball: Sparking! Zero se ha comportado de forma notable durante estos días. Incluso cuando la zona de combate estaba repleta de enemigos y de ataques completamente devastadores capaces de destrozar la arena en tiempo real. Todo ello gracias al anteriormente citado Unreal Engine 5, con el que la experiencia es mucho más fluida y divertida.

... y disfruta de otros completamente nuevos

Pero si hay algo que hace único a este juego es su Modo Historia y la cantidad de personajes jugables que irás desbloqueando a medida que vas metiéndole horas. Desde la versión infantil de Goku o el maestro Muten Roshi hasta los más recientes Bills y Whis. Tras adentrarnos por primera vez en el Modo Historia tendremos que escoger la historia que quieras protagonizar. Podrás comenzar con Goku, pero también con otros personajes como Vegeta, Gohan, Trunks, Piccolo, Freezer o incluso personajes más modernos como Goku Black y Jiren.

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Y cada uno de estos personajes tiene su propia historia. Pero la cosa no queda ahí. Dependiendo de las decisiones que tomes a lo largo de tu aventura, también podrás ir desbloqueando historias alternativas (conocidas como Episodios Sparking) que nunca vimos en el manga ni en el anime. Podrás saber qué habría pasado si Goku no hubiese necesitado la ayuda de Piccolo para vencer a Raditz o si Vegeta hubiera derrotado a Célula en su segunda forma.

La experiencia de juego es muy divertida y frenética desde el primer combate. Nos encanta cómo todo salta en pedazos a medida que vamos lanzando Kamehamehas y también que la ropa vaya rompiéndose a medida que vamos recibiendo todo tipo de patadas y puñetazos. Y también su control por movimiento, con el que podremos imitar los distintos movimientos de nuestros personajes como ya hicimos en el pasado con la Nintendo Wii. El juego es muy dinámico y probablemente sea uno de los grandes puntos a favor de este título. Lo que sí que nos saca un poco de esta dinámica son los menús. Nos parecen bastante lentos. Sobre todo si vamos a movernos por el mapa del mundo, pues nos cuesta una barbaridad ir de un lado al otro del mapa para poder completar según qué misiones.

Conclusiones: el mejor juego de Dragon Ball para una portátil

Durante estos últimos años hemos disfrutado de un sinfín de videojuegos de Dragon Ball para todo tipo de plataformas. Pero, Dragon Ball: Sparking! Zero es, sin duda alguna, el mejor de todos ellos. No solo por la historia principal y por la gran cantidad de personajes jugables que ofrece para recrear combates de ensueño, que también, sino por el gran salto técnico que ha pegado el videojuego respecto a los títulos anteriores.

Y es que nunca habíamos visto algo así. No al menos en una videoconsola portátil, pues Bandai ha conseguido comprimir un auténtico titán gráfico en una consola de bolsillo para que todo el mundo pueda disfrutar de la historia de Goku y compañía. Nos gusta su calidad gráfica, aunque esos 30 FPS puedan acabar siendo un problema si eres de los que disfrutan del modo online, y sobre todo el nivel de destrucción que nos ofrece cada uno de los combates. Podremos destruir la Sala del Tiempo hasta reducirla a cenizas o romper por completo el escenario del Torneo del Multiverso como en Dragon Ball Super. En definitiva, Dragon Ball: Sparking! Zero es una experiencia divertidísima tanto para jugar tú solo en el modo historia como para disfrutar con tus amigos y amigas en el modo online y cooperativo.