"Hasta el moño de puteros y acosadores": crece el malestar en el PSOE ante las denuncias por acoso sexual
"Estos comportamientos nos desgarran por dentro", asegura la diputada socialista andaluza Ángeles Férriz

La portavoz adjunta del PSOE en el Parlamento de Andalucía, Ángeles Férriz. / Jose Manuel Pedrosa

Madrid
El PSOE prometió contundencia ante las acusaciones de acoso sexual y ha anotado una nueva baja en el partido tras registrarse una denuncia anónima contra el presidente de la Diputación de Lugo, José Tomé, que ha pedido la suspensión cautelar de militancia y ha anunciado su dimisión del cargo.
Más información
En un primer momento, Tomé rebatió ante los medios las acusaciones y anunció acciones legales, pero pocas horas después convocó a la prensa para anunciar su dimisión "voluntaria" para no dañar al partido y facilitar su defensa.
Pese a todo, su intención es seguir como diputado provincial y alcalde de Monforte de Lemos desde el grupo de no adscritos, al que se pasará con todos los concejales socialistas, según ha explicado.
De forma casi inmediata, el PSOE le han instado a entregar sus actas como diputado y como alcalde y ha anunciado que, a petición del PSdeG, se nombrará de forma inmediata una Comisión Gestora en la provincia de Lugo.
El Órgano contra el Acoso creado en el seno del partido recibió el lunes por la tarde la denuncia y diversos testimonios de este caso y, asegura, ese mismo día inició su "análisis y contraste". Tomé admite alguna broma o algún chiste, pero nunca un acoso sexual.
Su expediente, como el de Paco Salazar, seguirá su curso hasta concluir con el informe de conclusiones, ya que la suspensión de militancia no supone el fin del procedimiento.
Este nuevo caso ha sacudido al partido, que ha visto cómo las denuncias de acoso sexual centraban la última sesión de control al Gobierno, con el PP acusando al Gobierno de permitir y encubrir un machismo que es un "código de conducta" en el PSOE.
Como hizo en el pleno el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, desde el PSOE han advertido de que las actitudes machistas son un problema estructural contra el que hay que actuar con contundencia y han recalcado que el PSOE es el único partido que tiene un canal interno para denunciar este tipo de actitudes.
Los socialistas han querido distinguirse del PP, al que han recordado desde el caso Nevenka, en referencia al acoso sexual denunciado en 2001 por la concejala de Ponferrada Nevenka Fernández contra el alcalde de esta localidad Ismael Álvarez, de su pasividad ante los casos de supuesto acoso que afectan a los alcaldes de Estepona (Málaga) y Algeciras (Cádiz).
Malestar creciente en el PSOE
Sin embargo, hay un malestar creciente dentro del partido por estos casos y la portavoz adjunta del PSOE en el Parlamento de Andalucía, Ángeles Férriz, no ha dudado en expresarlo con total crudeza: "Estoy hasta el moño de puteros y acosadores".
"Me duele en un partido como el mío donde estos comportamientos nos desgarran por dentro, porque no tienen cabida y porque no pueden cuestionar toda la historia de una organización que ha sido la que ha protagonizado los mayores avances de la historia de los derechos de las mujeres", ha sentenciado Ferriz.
"Y cuatro sinvergüenzas no pueden tirar por tierra todo el trabajo que hacemos día a día muchísimas mujeres y muchísimos hombres en el PSOE", ha apuntado. "Quiero que se sepa toda la verdad, que se llega hasta el final y que caiga quien tenga que caer".
La diputada socialista ha reconocido que su partido "sabe que ha cometido un error" y que también "es consciente del daño que genera" a sus propias filas, por lo que ha pedido perdón y está elaborando un expediente que estará resuelto en los próximos días sobre la actuación en el caso del exasesor de Moncloa Paco Salazar.
Ha apostado por "seguir actuando de manera contundente" ante los casos de acoso y ha criticado a "otros partidos machistas, que no han dudado en que salten por los aires los derechos de las mujeres cuando había que negociar sillones".




