Música simple y relacionada con el estrés: las canciones de los últimos 50 años se han vuelto más negativas
Un estudio relaciona las letras más negativas en los últimos años con el aumento de las tasas de depresión y ansiedad

Beyoncé y Bad Bunny, unos de los artistas más escuchados de los últimos años.

Madrid
A lo largo de la historia de la música, las tendencias musicales y los artistas han ido cambiando. Si bien en los años 60 The Beatles llevaron la locura del fenómeno fan a las principales ciudades de todo el mundo, en la última década las listas de éxitos han estado eclipsadas por cantantes como Beyoncé, Taylor Swift o Ariana Grande, entre muchos otros.
Pero los nombres de los artistas no han sido los únicos que han cambiado con el paso del tiempo, sino que, con ellos, se han transformado también las letras de las propias canciones.
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Esta es la conclusión a la que ha llegado una investigación encabezada por la Universidad de Viena y publicada en la revista Science Reports, vinculada a Nature, que este jueves ha publicado que las letras de 100 canciones más populares en Estados Unidos entre 1973 y 2023 son más negativas, simples e incluyen más palabras relacionadas con el estrés.
Una investigación que, aún así, incluye matices: en momentos como la pandemia por COVID-19 se publicaron canciones con letras más complejas y positivas, según dicho estudio. Los hallazgos, según la investigación, sugieren que dichos hallazgos reflejan las complejas formas en que las personas utilizan la música para lidiar con el estrés.
Además, han identificado algunas asociaciones con acontecimientos estresantes importantes, como los atentados del 11 de septiembre de 2001 y el inicio de la pandemia de covid-19. Los acontecimientos, de hecho, se asociaron con letras más complejas y positivas, que contenían menos palabras relacionadas con el estrés.
Vínculos con la depresión y la ansiedad
El equipo, que ha analizado las canciones con técnicas de Procesamiento del Lenguaje Natural, ha averiguado también que el aumento de letras más simples y negativas coincide con el crecimiento de las tasas de depresión y ansiedad, así como con el de la negatividad en los medios de comunicación y los libros de ficción.
A pesar de ello, el estudio afirma que, a partir del año 2016, ha incrementado la popularidad de las canciones con letras más complejas, aunque no determinan un argumento concreto.
Los resultados, según ha señalado el estudio, "enriquecen nuestra comprensión de la música como una herramienta única para la regulación emocional y subrayan su importancia a la hora de moldear y reflejar el estado de ánimo de la sociedad a lo largo del tiempo".




