Antxón Gómez. Una tortilla de patatas le cambió la vida

Girona

Antxón Gómez nos invita a desayunar en su casa de un pequeño pueblo de l'Alt Empordà, en Girona. Esta es su "guarida" o cueva de Ali Babá si atendemos a todos los objetos que colecciona, que cuelgan de las paredes y ocupan casi toda la casa. "Tengo un problema porque veo objetos que me gustan y pienso que pueden servirme para algún proyecto" pero en realidad confiesa, riendo, que es una coartada para quedárselos. Sobre la mesa un excelente "pà de coca", tomates, aceite y embutidos de la zona. Lleva casi toda su vida viviendo en Catalunya pero bromea con su diversidad vital. Es de Donosti, estudió química en Valladolid, su madre es madrileña y se apellida Santander.

Director de Arte. Su pasión y su profesión

Dice que es el oficio cinematográfico más desconocido. Todo el mundo sabe apreciar la fotografía, el vestuario, el guion... "Pero la dirección de arte es muy difícil de individualizar, porque no se nota". La virtud de su trabajo es que sea creíble y que los espectadores piensen que es un escenario real, cuando es todo fabricado y rodado en platós. La cueva y muchas localizaciones de "Dolor y Gloria", por ejemplo, estaban hechos en plató. La gracia, el verdadero mérito, es que sea tan real que confunda al espectador. Antxón Gómez ha sido el director artístico o Diseñador de Producción como dicen en el mundo anglosajón, de casi todas las películas de Pedro Almodóvar. Trabajó a las órdenes de Steven Soderbergh en las dos entregas de la vida del "Che", o el director catalán Bigas Luna.

La tortilla de patatas que le cambió la vida

Hemos hablado también de su militancia antifranquista y como se vio obligado a dejar la Universidad de Valladolid por una condena del Tribunal de Orden Público, el TOP. Se fue a Barcelona donde daba clases de física, química y matemáticas. Un día su mujer invitó a cenar a un amigo de Madrid que iba a rodar un anuncio publicitario. Este, al ver la casa, le dijo si quería ayudar en el rodaje. Lo hizo, funcionó, y hasta hoy. Antxón bromea con que lo que realmente conquistó al amigo fue la tortilla de patatas que le preparó.