Daniel Guzmán explica cómo funciona la industria del cine actualmente: "Tengo que estar con ilusión y sé que la película está muerta"

Madrid

La cena de los idiotés de Aimar Bretos suele recibir como invitados habituales a Manuel Jabois y Ángeles Caballero y, esta ocasión, también han acudido la actriz Lidia San José y el director, actor y guionista Daniel Guzmán, quien estrenó hace apenas dos meses la película La deuda, que trata temas importantes, como la gentrificación y el cuidado de los mayores.

Ante la pregunta de Bretos sobre la acogida que ha tenido este largometraje dirigido por Guzmán, este ha comentado que "va bien" y que sigue manteniendo público, y ha profundizado en su percepción sobre la industria del cine actualmente. "El escenario de la exhibición ha cambiado, hacer cine para verlo en el cine ya es de romántico y de utopía", aseguraba.

"No tiene mucho sentido estar cinco o seis años con un proyecto para que esté una semana en cartelera, porque hay 15 estrenos semanales. Luego las majors americanas tienen mucha fuerza y van manteniendo las suyas porque sino te chantajean", explica el director.

"Estoy yendo a coloquios sabiendo que la película está muerta de antemano"

Guzmán explica el funcionamiento de la elección de las películas en el cine, sorprendiendo al resto de los presentes. "Estrenas con 15 películas a la vez cada fin de semana y al siguiente llegan otras 15, entonces te quita el 50% de las salas, aunque las estés llenando", explicaba.

"Nosotros estuvimos la primera semana en el top 2 y, aún yendo increíble, te quitan el 50% de los pases. Yo estoy yendo a coloquios sabiendo que la película está muerta de antemano", admite el director.

El madrileño comparte que, tras un coloquio que llenó la sala de cine, preguntó cuántas entradas se habían vendido para el siguiente pase y le dijeron que la siguiente película ya no era la suya, era otra que había vendido solo ocho entradas, pero que interesaba que esa distribuidora le diera a ese cine la siguiente película importante que hiciera.

Volviendo a La deuda, Lidia San José apunta que le parece una película "maravillosa", a lo que Guzmán añade que "en el coloquio todo el mundo dice que es una película imprescindible y necesaria por los temas que toca y, de repente, dices 'Joder, yo tengo que estar con ilusión, pero sé que está muerta la película'".