De estrella de la NBA a liderar un equipo profesional de pesca deportiva: el giro radical en la vida de Ben Simmons

Menos de una década ha pasado desde que una de las mayores promesas de la NBA haya pasado de disparar las expectativas a cambiar la pelota de baloncesto por una barca y una caña. La historia de Ben Simmons forma ya parte de un cúmulo insólito de giros. Apenas unos meses han pasado desde que terminase su vinculación con Los Ángeles Clippers y, sin equipo desde entonces, ha dado un paso de gigante para hacer de su hobbie, la pesca, una nueva forma de vida.

Y es que Simmons ha dado la gran sorpresa de las últimas horas confirmándose como nuevo copropietario de uno de los equipos de las South Florida Sails, competición de pesca profesional en mar abierto. Pocas veces había acaparado tanto protagonismo esta disciplina a nivel mediático, motivo por el que desde la federación han sacado pecho con este 'fichaje': "Ben Simmons es una incorporación maravillosa al grupo propietario de clubes de SFC, que incluye atletas y emprendedores de primer nivel líderes en sus respectivos campos", ha valorado el CEO de Sports Fishing Championship, Mark Neifeld, en declaraciones recogidas por el propio organismo.

No era ningún secreto la pasión de Simmons por esta práctica, aunque pocos vieron venir este paso hacia el profesionalismo. Sus redes sociales, de hecho, son un buen repertorio de capturas del jugador australiano.

Pese a este giro hacia la pesca, Ben Simmons no ha cerrado ni mucho menos la puerta a las canchas. Ya en sus últimas comparecencias públicas había dejado caer cómo estaba preparándose para volver con fuerza a la NBA. Su edad, 29 años, y su potente currículum -tres veces en el All Star de la NBA después de hacer cumplir las expectativas generadas como número 1 del draft en 2016, todavía lo avalan como una propuesta más que interesante a pesar de los problemas físicos que le han mermado en las últimas temporadas. A la espera aún de convencer de nuevo a alguna franquicia, eso sí ya ha encontrado un reto en el agua que le obligará a exprimirse física y mentalmente.