Así trabajan quienes montan las luces de Navidad: "Para nosotros, empieza en agosto"

Madrid

A estas alturas del año, las calles ya están llenas de luces. Pero esto solo es posible porque, meses atrás, alguien se ha encargado de montarlas. A finales de noviembre quedamos en Alcorcón con Rafael Ruiz Carolo, encargado del Grupo Ximénez, la empresa que instala alumbrado navideño por toda España.

"En este momento estamos preparando la fachada del Ayuntamiento para colocarle los motivos y arriba estamos montando las cortinas de luz", explica Rafael mientras supervisa el trabajo. "Estamos preparando lo que es la instalación".

Rafael ha notado un cambio importante en los últimos años: la carrera por ser el primero en encender las luces. "Todos quieren encender antes. Para nosotros la Navidad empieza en agosto", asegura. Antes, el montaje comenzaba en noviembre porque el alumbrado se encendía cerca del sorteo de la Lotería de Navidad, "pero ahora hay ciudades que encienden en noviembre".

Esa carrera por ser el primero en encender también implica ser el primero en montar. En una ciudad como Alcorcón, con más de 170.000 habitantes, se tarda unas dos semanas en completar la instalación.

También quedamos con los técnicos del Ayuntamiento, de la concejalía de Cultura. Diego Pulgar explica que el diseño de la iluminación se renueva constantemente: "Cada año cambian los motivos, las ubicaciones y se incorporan espacios nuevos. Lo que el público ve va cambiando".

Además, cada vez se apuesta más por la sostenibilidad. Mercedes Sáez, también técnica de la concejalía, lo confirma: "Desde el año pasado claramente se está apostando por la sostenibilidad, la ecología, las luces LED, para evitar todo tipo de contaminación y no solo la lumínica".

Árboles tan grandes que no caben por la calle

Los operarios de Ximénez no solo montan las luces que cuelgan entre las calles, también las grandes figuras. "Ese árbol mide diecisiete metros y tiene una estructura que se puede atravesar por dentro", cuenta Mercedes. "Los ciudadanos pueden entrar y transitar dentro del árbol".

Montar esas piezas es la parte más complicada porque las enormes estructuras no caben por cualquier calle. "Necesitamos una grúa muy grande, mucha infraestructura", explica Rafael. "Hay que llevarla poquito a poco con un camión más pequeño porque en los centros de las ciudades no entran camiones grandes ni grúas grandes".

Nos despedimos de Rafael y los operarios en el centro de Alcorcón, pero vemos que no paran de acercarse curiosos. "Preguntan qué es lo que se va a poner, cuándo se van a encender", comenta Rafael.

La primera parte del trabajo de los 'poneluces' ya está hecha. Ahora queda disfrutarlo… y, cuando los Reyes Magos estén camino de Oriente, desmontarlo y guardarlo hasta el año que viene.