Dos novios y unas cartas "picantes": lo que llevó a Àngels Barceló, Julia Otero, Pepa Fernández y Gemma Nierga hasta la radio

Uno de los momentos más bonitos de la gala del Centenario de la SER se vivió cuando cuatro presentadoras emblemáticas subieron al escenario. Àngels Barceló, Julia Otero, Pepa Fernández y Gemma Nierga compartieron con Andreu Buenafuente sus inicios en la radio: «Tenía 17 años y un novio entusiasmado con el cine y como no podía hacer cine, pensó hablaré sobre cine en la radio. Convenció a Radio Sabadell para que me metiera en un programa de cine y me llevó de locutora consorte», contó Otero. Nierga tenía una historia parecida: «Tenía también 17 años. Radio Vilassar de Dalt. Un compañero, un amigo, me dice oye, haré un programa de cine. ¿Quieres leer tú los títulos de crédito? Y yo con 17, me coloqué delante de un micro». Buenafuente se animó a contar su caso, que también tenía que ver con amor, pero a la radio: «En casa sufría mucho, yo era muy mal estudiante y les dije, voy a estudiar COU Nocturno y radio. Y fui dos días a COU y el otro día me encontré al tío que tiene los apuntes, porque le dije guárdame los apuntes, por si acaso, y hace poco me lo encontré y dice, oye, ¿qué hago con los apuntes? Digo, guárdalos», contaba entre risas. A Àngels Barceló un profesor de la universidad le dijo que hacían pruebas en Catalunya Ràdio: «¿Por qué no te presentas?, me dijo y llegué ahí. ¿Sabes escribir catalán? Sí. Mentira. Y ya está. Y a partir de ahí, con Jordi Basté, que está por ahí», contaba. En el pueblo de Pepa Fernández (Cervera, en Lleida) abrieron una radio: «Me presenté a las pruebas y me cogieron. Entonces ahí me quedé ya para siempre. No en Cervera, pero sí en la radio, porque la radio es un medio que cuanta más radio haces, más ganas tienes de hacer radio así». Todos coinciden en algo clave para desarrollar esa pasión por la radio: escucharla desde la infancia. «Yo tengo toda, toda mi infancia está llena de radio constantemente», decía Nierga, contando que escuchaba mucho Radio Peninsular y que allí conoció a Luis del Olmo. También han recordado las largas tardes de escuchar el Consultorio de Elena Francis, aunque ahora lo ven con otra perspectiva. «Un auténtico señoro, dando consejos de señoro muy machistas a todas las pobres», decía Julia Otero, y Nierga recordaba cuando le ofrecieron el programa Hablar por hablar y que ella no quería ser «la Francis». Recordando la trayectoria de todos estos profesionales en la radio, Pepa Fernández recordaba que ella llevaba 40 años en la antena y que Luis del Olmo 70, de los 100 años que estamos celebrando. Al reflexionar sobre el tiempo que ha pasado desde que comenzó a desarrollarse el medio, Buenafuente les ha preguntado: «¿Creéis que tenemos una radio mejor que cuando empezamos?». Barcelò ha sido la primera en responder y ha dicho que considera que es diferente. «Yo mejor tampoco diría porque tenía su romanticismo y su historia. Que hay algunos técnicos también de la radio, las cintas, o el llamar y hacer una crónica de fuera poniendo unas pinzas en el teléfono de una cabina telefónica», ha recordado, al tiempo que Fernández le interrumpía diciendo: «Y sobre todo, que nadie nos conocía». Sobre esa «magia» de la que hablan, de que antes no eran rostros conocidos y había esa intriga entre los oyentes, ahora consideran que se ha perdido por la difusión que hay ahora. «Cuando se inventaron aquello de si te gusta la locutora, no pases por la zona», recordaba Fernández, provocando las risas de todos ellos. «A mí me decían el que vale, vale y el que no para deportes. Y yo empecé con deportes, pero luego, para suavizar, me decían es un todoterreno», añadía Buenafuente. Para terminar, ambos reconocen que se sigue haciendo «muy buena radio», pero que es diferente con respecto a los años anteriores, y no por ello es mejor.

Dos novios y unas cartas "picantes": lo que llevó a Àngels Barceló, Julia Otero, Pepa Fernández y Gemma Nierga hasta la radio

Las cuatro presentadoras compartieron un rato de conversación con Andreu Buenafuente en la gala del Centenario de la SER

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