Preocupación y emoción a partes iguales en Europa por la aparición de una pareja de lobos extremadamente rara
Las opiniones en cuanto a estos animales varían dependiendo de a quién se pregunte, por diferentes razones
Imagen de archivo de un lobo / filip_canik / 500px
En People and Nature se publicó un estudio multidisciplinar de la Universidad Autónoma de Madrid, el Centro de Investigación en Biodiversidad y Cambio Global, el CSIC y la Fundación Entretantos, que puso de manifiesto que la ganadería extensiva en la Sierra de Madrid puede ser compatible con la recuperación de grandes vertebrados, concretamente se refería a la coexistencia de las explotaciones ganaderas con ungulados silvestres, buitres y lobos.
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Sin embargo, agricultores y ganaderos siguen teniendo sus reticencias a ello por los estragos que creen que sufren por parte de estos animales en sus actividades. Hemos conocido casos recientes de ataques de lobos contra sus rebaños y explotaciones, lo cual ha llevado incluso a que la Comunidad de Madrid acordara un incremento del 25% de las indemnizaciones a ganaderos, de manera general, pudiendo llegar a un 10% más en casos de daños a razas autóctonas que se encuentren en peligro de extinción o aquellas en las que se hubiesen tomado medidas de protección previamente.
Pero la realidad es que la preservación de los lobos se ha intentado reforzar porque en muchos periodos ha estado en serio peligro como especie. Felizmente, su recuperación continúa satisfactoriamente en Europa, donde los datos se han incrementado de manera exponencial en la última década, concretamente un 60%, pasando de alrededor de unos 12.000 ejemplares hace 10 años a unos 21.500 en 2022, según un estudio publicado en Sustainability and transformation. Y ahora se abre una nueva vía para su expansión con unos avistamientos recientes.
Una pareja única
Un descubrimiento en Francia ha hecho alegrarse a los investigadores y ecologistas, en contraposición de muchas personas del entorno rural que lo ven como una amenaza. La organización ecologista Carduelis informó de la aparición de una extraña pareja formada por un lobo macho germano-polaco y de una loba italiana, algo que se considera una buena noticia porque demostraría la posibilidad de fortalecer la población de lobos europeos con la puesta en valor de la variación genética.
Así lo afirmaba en un comunicado de prensa Carmen Muñoz, miembro de la asociación ambiental Carduelis, ya que esta "mezcla genética" encontrada puede dar un impulso y "siempre es bueno para la especie". Pero no todos están contentos, como hemos apuntado. Algunos agricultores y ganaderos, ante esta aparición, temen que su sustento esté en entredicho por los ataques de esos lobos, de hecho, algunos de ellos han recibido permiso de las autoridades locales francesas para poder dispararles en protección de sus animales, asegurándose en la web Tieteen Kuvalehti que el macho ya ha resultado herido.
Jacobo Feijóo, responsable de Desenvolvemento Rural de Unións Agrarias
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