La Generación Z está poniendo fin a una habilidad humana de hace 5.000 años por culpa de la tecnología
Las personas de esta generación han nacido rodeadas de tecnología

Un móvil. / CFOTO

La escritura a mano, una habilidad que ha sido fundamental para la humanidad durante más de 5.000 años, está enfrentando un marcado deterioro entre los jóvenes de la Generación Z. Esta generación, nacida en un mundo dominado por la tecnología digital, está mostrando grandes dificultades para escribir de manera legible y estructurada. Este fenómeno, atribuido al uso predominante de dispositivos como celulares, tablets y ordenadores, plantea interrogantes sobre el futuro de una habilidad que ha sido esencial para la comunicación y el aprendizaje.
La escritura a mano tiene sus raíces en civilizaciones antiguas como Mesopotamia, Egipto y China, donde los primeros signos gráficos fueron desarrollados para registrar información y transmitir ideas. Este avance marcó el inicio de un proceso que culminó con la invención de la imprenta y la posterior democratización del aprendizaje durante la Revolución Industrial.
Según un informe publicado por Türkiye Today, los jóvenes de la Generación Z han comenzado a mostrar grandes dificultades para escribir de manera legible y estructurada. Este fenómeno se debe en gran parte al uso predominante de dispositivos digitales para la comunicación y el aprendizaje. Los estudiantes universitarios están dejando de lado herramientas tradicionales como el lápiz y el bolígrafo, optando casi exclusivamente por teclados y pantallas táctiles para sus actividades diarias.
Nedret Kiliceri, profesor en Turquía, ha observado este cambio cultural en sus clases. "Llegan a clase sin bolígrafos y prefieren usar el teclado para todo", comenta Kiliceri. Este comportamiento refleja un cambio impulsado por la influencia de las redes sociales y las nuevas formas de comunicación digital. La digitalización ha hecho que se dejen de hacer cosas útiles para el bienestar, afectando la capacidad de memoria y concentración de los jóvenes.
La escritura a mano no solo es una habilidad práctica, sino que también tiene beneficios cognitivos. Estudios han demostrado que escribir a mano mejora la memoria y la capacidad de concentración. La acción de escribir activa áreas del cerebro relacionadas con el pensamiento crítico y la creatividad.




