El tiburón blanco más grande merodea un popular balneario y sus 725 kilos no pasan precisamente desapercibidos
Mide alrededor de 4,3 metros de largo
Dave J Hogan (Dave J Hogan/Getty Images)
Contender, el tiburón blanco más grande jamás registrado por investigadores en el Atlántico, está avanzando hacia un conocido destino de vacaciones en Estados Unidos. Con 14 pies de longitud (unos 4,3 metros) y un peso de más de 720 kilos, este impresionante ejemplar fue marcado por la organización OCEARCH el pasado enero en el Atlántico Norte, a unas 45 millas de la costa entre Florida y Georgia, cerca de Jacksonville.
Tras casi un mes sin ser detectado —su rastreador solo emite señal cuando la aleta dorsal rompe la superficie—, Contender volvió a aparecer recientemente al norte, cerca de Pamlico Sound, en Carolina del Norte. Según los expertos, en las últimas semanas se ha desplazado progresivamente hacia el norte.
Los científicos calculan que el tiburón tiene unos 30 años y que la parada actual forma parte de un período clave de alimentación. Este descanso le permitirá acumular la energía necesaria para recorrer los más de 1.600 kilómetros que podría abarcar su viaje.
Una migración clave para su supervivencia
“En esta época del año, los grandes tiburones blancos comienzan su migración de finales de primavera y principios de verano, moviéndose desde sus zonas de invernada en el sur hasta sus áreas de alimentación en el noreste de Estados Unidos y el Atlántico canadiense”, explicó Harley Newton, científico jefe y veterinario de OCEARCH.
El seguimiento de Contender no solo sirve para estudiar su comportamiento, sino que también impulsa la conservación de la especie. Los grandes tiburones blancos desempeñan un papel esencial en los ecosistemas marinos, ya que ayudan a regular las poblaciones de sus presas. Sin embargo, se enfrentan a múltiples amenazas como la sobrepesca, la pérdida de hábitat y los efectos del cambio climático. En los últimos años, muchos de estos tiburones han sido depredados por orcas, lo que ha llevado a algunos ejemplares a buscar nuevos mares, un fenómeno observado especialmente en Sudáfrica y Australia, donde las orcas parecen centrarse en el hígado de estos grandes depredadores.
