El extraño insecto verde que causa algo de miedo pero que jamás debes dañar si entra en tu casa o jardín
Este insecto de aspecto peculiar es un gran aliado para controlar plagas y proteger tu jardín de forma natural


Aunque su aspecto no resulta muy atractivo a primera vista —un cuerpo alargado de color verde, alas grandes y transparentes y unos ojos llamativos—, el llamado ojo dorado es en realidad un pequeño aliado para el hogar y el jardín. Este insecto, perteneciente a la familia Chrysopidae y al orden Neuroptera, es fácil de reconocer por sus largas antenas y, sobre todo, por sus grandes ojos brillantes de tono dorado, aunque a veces pueden ser algo más oscuros.
Con la llegada del otoño, es común que estos insectos busquen refugio dentro de las casas o apartamentos. Durante los meses fríos, eligen grietas estrechas y rincones poco accesibles para pasar el invierno. Cuando regresa la primavera, los ojos dorados abandonan sus escondites para salir en busca de alimento, lo que trae consigo beneficios para nuestro entorno.
Un eficaz depredador natural
Los ojos dorados son grandes devoradores de pulgones, insectos pequeños y sus larvas o huevos. De hecho, una sola larva de este depredador puede eliminar hasta 450 pulgones en apenas dos semanas. Además, las larvas del escarabajo de la patata también son presas de estos insectos, lo que contribuye a reducir la población de esta plaga. Lo mejor de todo es que el ojo dorado es completamente inofensivo para las personas y los animales.
Por eso, lejos de preocuparnos si encontramos uno en casa, su presencia debería alegrarnos: es señal de un equilibrio natural que ayuda a proteger nuestras plantas.
Cómo atraer al ojo dorado al jardín
Para favorecer la presencia de estos valiosos aliados, podemos plantar especies melíferas en nuestro jardín, ya que los ojos dorados también se alimentan de néctar y polen. Entre sus plantas preferidas están la milenrama, el tomillo, el trigo sarraceno o la facelia. Los sauces, los serbales y los tilos también resultan muy atractivos para ellos.
Otra opción para atraerlos consiste en ofrecerles agua azucarada o rociar las plantas con esta mezcla, lo que puede animarlos a instalarse cerca y ayudar a mantener a raya a las plagas de forma natural.




