Recupera su bicicleta robada y le escribe una nota al ladrón digna de una peli de Liam Neeson: "Sabemos quién eres"

Un residente de Ámsterdam logró recuperar su bicicleta robada gracias a un dispositivo de rastreo oculto. Ante la falta de respuesta policial, decidió actuar por su cuenta y dejar un mensaje directo al autor del robo.

Durante más de 45 años, este ciudadano ha recorrido diariamente las calles de Ámsterdam en bicicleta. Como él mismo admite, en todo ese tiempo le han robado varias. Tras su último robo, compró una nueva bici a través de la plataforma de segunda mano Marktplaats. No se trataba de una fatbike ni de una bicicleta eléctrica, sino de una bicicleta clásica con portaequipajes y caja delantera.

Por recomendación de un amigo, decidió adquirir un AirTag, un pequeño dispositivo de rastreo de Apple. Lo envolvió en plástico de burbujas, lo escondió bajo el sillín y lo sujetó con una brida. Lo registró en su teléfono móvil con el nombre “Bicicleta Verde”, y el sistema le permitía saber en todo momento dónde estaba su bicicleta, incluso cuando se encontraba en su domicilio en el barrio de De Pijp.

La semana pasada, al salir de casa, notó que su bicicleta había desaparecido. Abrió la aplicación de rastreo y detectó que la señal del AirTag indicaba una ubicación en Groenburgwal. Al llegar, encontró su bicicleta encadenada a otra, con su propio candado roto y uno nuevo instalado.

El ciudadano llamó a la policía, pero la respuesta fue poco concluyente. Un agente le indicó que podía llevarse la bicicleta si conseguía abrir la cadena. Otro mencionó que debía ser confiscada primero y devuelta posteriormente. Un tercer agente le recomendó presentar una denuncia, pero le preguntó si tenía el recibo de compra, algo que no podía aportar, al haberla adquirido de segunda mano.

Ante la falta de una solución institucional, decidió resolver el problema por su cuenta. Con la ayuda de un amigo, obtuvo una amoladora y un cable alargador, y con la colaboración de un vecino, cortó la cadena y recuperó su bicicleta.

Más allá de la recuperación, decidió dejar un mensaje al presunto ladrón. Desde su casa redactó una nota en su ordenador y la pegó a la bicicleta que había quedado en el lugar. En la nota se leía lo siguiente:

"La policía de Amsterdam-Amstelland ha establecido que usted robó recientemente una bicicleta de transporte para mujeres de color amarillo y verde en De Pijp, distrito de Amsterdam-Zuid, y luego la estacionó frente a Groenburgwal 7 con un candado nuevo que usted mismo instaló.

Te tenemos en cuenta. Sabemos quién eres y te vigilamos. Tienes 48 horas para presentarte en la oficina de Burgwallen, Nieuwezijds Voorburgwal 35".