Un cardiólogo siente un dolor en el pecho y es despedido por ir a urgencias: "Nunca me preguntaron '¿Cómo estás?'"
Una situación surrealista y de poca empatía con el trabajador

Pasillo de un hospital / corradobarattaphotos

Marco Castellano es médico y hasta hace unos meses ejercía con un contrato ordinario de colaboración y servicios profesionales en la Croce Verde de Cavallino-Treporti (Venecia). Este hombre de 65 años había trabajado anteriormente en urgencias en Oderzo (Treviso), San Donà di Piave y Jesolo (Venecia), hasta recalar en el centro antes mencionado, pero dejó de pertenecer a él después de un desafortunado incidente que experimentó, y eso que su vida estuvo en peligro.
Corriere del Veneto cuenta que este cardiólogo había sido sometido en el pasado a una cirugía de corazón con cuatro stents coronarios, que indican que son dispositivos utilizados para mantener abiertas las arterias coronarias obstruidas, por lo que tenía antecedentes de problemas cardiacos. El 12 de febrero de este año, empezó a sentirse mal casi al final de su turno y tuvo que ir a que lo atendieran, saliendo del puesto de primeros auxilios en la aldea de Ca' Savio donde estaba.
Fue a urgencias en Jesolo, a 20 kilómetros de allí, y por suerte pudo recuperarse. Esa fue la buena noticia, pero la mala le llegó unos días después, cuando descubrió que lo habían despedido. Al parecer, el centro de salud indicaba "la revocación de una asignación freelance y autónoma, sin ninguna obligación de duración", alegando que "el médico abandonó el Puesto de Primeros Auxilios sin informar previamente a la Dirección de la Croce Verde, a la tripulación ni al Centro de Operaciones Suem 118 en Venecia, que gestiona la coordinación. El vínculo de confianza de la relación profesional freelance ha cesado".

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Las explicaciones de Castellano
El médico atendió a Corriere del Veneto y dio su versión de los hechos, explicando que empezó a sentirse mal después de subir varios tramos de escaleras corriendo durante el trabajo. "Los primeros síntomas llegaron alrededor de las 6:40 o 6:45 p. m. Tomé la medicación que me recetaron después de la cirugía de corazón; siempre la llevo conmigo. Mientras tanto, también atendí a algunos pacientes. A pesar de la medicación, una hora después los síntomas seguían sin desaparecer. Fue necesario hacerme un electrocardiograma, pero no fue posible en el puesto de primeros auxilios donde me encontraba", cuenta Marco.
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Se quedó solo, pero aguantó hasta que no pudo más y se tuvo que marchar, aunque cree que la acusación de incumplimiento del deber no existe, diciendo que salió del trabajo "exactamente ocho minutos antes de terminar". "No tuve otra opción. Diez minutos antes de terminar el turno, decidí ir al hospital y a las 20:12 le envié un mensaje a la directora de la Croce Verde para avisarle", aseguró Castellano, que se sorprendió cuando llegó la carta certificada que le indicaba el despido y, sobre todo, no entiende la falta de empatía y comprensión. "Nunca me preguntaron si estaba bien. Fue una situación humillante".
Asegura que su relación con el director de Croce Verde era "tranquila" y que incluso le invitó a su boda, por eso fue todo totalmente inesperado para él. "Esperaba que, tras recibir el correo electrónico certificado de mi abogado solicitando la reincorporación, actuaran rápidamente. Pero han pasado cuatro meses y no ha sucedido", y aunque dice que están "disponibles para hablar con la unidad de salud local", considera que "no me parece que exista la misma disponibilidad". Encima, está ofendido porque cree que le acusaron de algunas cosas que son falsas.
"Dijeron que dejé abierto el puesto de primeros auxilios, pero no es así. Y luego afirman que un niño con fiebre alta pasó por allí cuando yo no estaba. No tenemos confirmación concreta de esto, pero cabe decir que, en cualquier caso, cada vez que llega un paciente pediátrico lo enviamos al hospital de San Donà di Piave; nunca tratamos a niños a menos que solo presenten pequeñas abrasiones. Incluyeron varias cosas en la carta que, desde mi punto de vista, son incorrectas. Y, en cualquier caso, no entiendo cómo se puede justificar una infracción grave en caso de ser internado por un posible infarto", sentencia Marco Castellano.




