Si las flores de tomate se están marchitando, haz esto para salvarlas y acabar con una buena cosecha
Un componente para salvarlos

Planta tomates / Laurie Rubin

Lola Gómez se dedica a la formación y a la divulgación relacionada con el cultivo de frutas y hortalizas en los invernaderos de la provincia de Almería y está al frente de Clisol Agroturismo. La experta estuvo hace unos meses en 'Gastro SER' hablando de diversos temas, donde entre otras cosas fue preguntada por el sabor de los tomates, reconociendo que ella también padece su ausencia cuando de junio a noviembre no tiene los que ella misma cultiva.
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"Ahora estoy comprando tomates de Castilla y León, de la Ribera de Navarra o cherris de la Alpujarra, y es difícil encontrar sabor, aunque todos son de cultivos al aire libre", decía en el programa, explicando que "hay una cosa que se llama distribución, logística... incluso algo de especulación, y resulta que es muy importante que los canales sean cortos porque no es lo mismo que un tomate pase dos días refrigerado a que pase dos semanas". Y, por supuesto, dice que entiende perfectamente a los consumidores que se quejan del sabor.
Explica lo que ella hace con estos productos, apuntando que "los saco de la nevera para atemperarlos, por supuesto", pero aún así asegura que "a veces no solo no tienen sabor, sino que son cartón". De esta forma, se incide en la forma de cultivo y conservación de los tomates, que es algo clave para que crezcan de manera sana y que tengan la mejor calidad. Expertos en la materia tienen sus propias soluciones y aportan ciertos trucos para que fruto y planta estén en condiciones óptimas.

El amplio mundo de los tomates
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Solución para los tomates
En la web Vakary ekspresas abordan este tema de manera concisa y clara asegurando que tienen una solución si las flores del tomate se marchitan y no hay frutos, y haciéndola inmediatamente se puede obtener una gran cosecha, todo gracias al consejo de un jardinero que simplemente utiliza un producto que, como parece obvio, hay que preparar en una mezcla para rebajarlo antes de aplicar a los cultivos en el momento que más lo necesitan para prosperar.
Así, escriben que la clave está en tratar la planta con ácido bórico. Aseguran que el jardinero consultado por el medio señaló que esta preparación ayuda a que los tomates cuajen sus frutos, aumenta el rendimiento y el contenido de azúcar, lo que provoca que su sabor se intensifique y sea mucho mayor. En cuanto a los tiempos, explican que los tomates enanos se han de tratar con esta solución unas tres veces semanales y los altos al menos una vez cada 10 días.




