La psicología revela el significado y las conductas ocultas de ponerse calcetines para dormir
Usar calcetines para dormir no solo mejora la temperatura corporal o el confort

Una persona durmiendo con calcetines.

Puede parecer un simple gesto para combatir el frío, pero dormir con calcetines dice mucho más sobre ti de lo que imaginas. Según expertos en psicología, este pequeño hábito nocturno podría estar estrechamente ligado a tu forma de ser, a tu necesidad de seguridad… e incluso a tu manera de relacionarte con el mundo.
Usar calcetines para dormir no solo mejora la temperatura corporal o el confort: también puede ser un signo de autocuidado emocional.
Para muchas personas, ponerse calcetines al acostarse activa un ritual que transmite protección, calma y control. Y eso, psicológicamente, tiene un peso importante.
Un ritual que busca control, confort y rutina
Algunas corrientes psicológicas apuntan que quienes mantienen esta costumbre suelen tener personalidades organizadas, con una fuerte necesidad de estabilidad y previsibilidad. El acto de ponerse calcetines antes de dormir no es casual: es una manera de establecer un entorno controlado que favorece el descanso y reduce la ansiedad.
Alta sensibilidad sensorial
Además, los psicólogos señalan que las personas con mayor sensibilidad al frío o a texturas incómodas son más propensas a usar esta “barrera” al dormir. No soportan dormir con los pies expuestos o con contacto directo a ciertas sábanas, y encuentran en los calcetines una solución sensorial efectiva.




