Revela el sistema solar casero que diseñó en 1972, llaman las puertas y son los expertos con una propuesta clara
Pionero sin saberlo, Georges Lemaître creó un sistema solar funcional décadas antes de que la sostenibilidad fuera tendencia

Una casa de madera en el campo. / GETTY

Lo que empezó como una simple reforma de jardín acabó revelando un tesoro tecnológico escondido durante más de 50 años.
La familia Martin, al renovar una vieja caseta de madera en su casa de los Vosgos, descubrió algo que jamás imaginaron: un sistema solar artesanal completo, construido en 1972 por el anterior dueño de la vivienda, Georges Lemaître, un ingeniero jubilado con pasión por el reciclaje.
“Sabíamos que era un manitas, pero jamás imaginamos algo así”, cuenta Julien Martin, aún asombrado. Lemaître había reutilizado paneles solares y piezas de desguace para alimentar su hogar con energía renovable, décadas antes de que se hablara de sostenibilidad.
Junto al sistema, encontraron planos, esquemas y notas técnicas cuidadosamente guardadas. Un legado silencioso que demuestra cómo la innovación puede nacer en el jardín de un visionario.
El descubrimiento ha atraído ya la atención de expertos en energías renovables, que han pedido examinar el invento de cerca. Y no es para menos: se trata de un ejemplo único de autosuficiencia energética adelantada a su tiempo.
La familia Martin quiere preservar intacto el refugio como pequeño museo, para inspirar a otros a creer en la energía limpia, el ingenio y la autosuficiencia.
“Es un recordatorio de que no siempre hacen falta millones para cambiar el mundo. A veces, basta una buena idea… y una caseta en el jardín.”




