El mito del gato "autónomo y autosuficiente" que hay que desmontar antes de dejarlo solo este verano

En época de vacaciones es cuando más se intensifican los abandonos de mascotas, una lacra que por desgracia aún no se ha eliminado por completo de nuestra sociedad. Muchos lugares no dejan que entren animales y las personas que quieren disfrutarlos las dejan con amigos o familiares, pero cuando esta opción no es posible, se cae en malos hábitos. Ya no solo el extremo del abandono, sino de incluso dejarlos solos en casa, sobre todo en el caso de los gatos.

Como exponen en La Stampa, estos son animales de hábitos y muy ligados a su territorio, por ello suelen tener dificultades con los cambios temporales, eso, unido a que suelen tenerse como muy independientes y autosuficientes hasta cierto punto, es caldo de cultivo para pensar en dejarlos solos un tiempo. Sin embargo, no son inmunes a la soledad, porque aunque pueden quedarse solos por periodos cortos, también necesitan estimulación, cuidados e interacción diaria. Y es que sus necesidades van mucho más allá de las mínimas indispensables.

Su caja de arena debe mantenerse limpia, el agua debe estar siempre fresca y de fácil acceso, y la comida debe ser apropiada para sus hábitos alimenticios, pero también deben tener una rutina de juego, observación, interacción y ejercicio, así que si los dejamos sin todo esto de manera repentina, pueden experimentar estrés, aburrimiento o comportamientos regresivo. Si tienes que ausentarte, hay que preparar el entorno para que sea ordenado, predecible, familiar y seguro, además de no dejarlo solo durante mucho tiempo.

Vacaciones y presencia

En el medio italiano advierten que aunque tu gato puede quedarse solo, una visita diaria de alguna persona de confianza o un cuidador es totalmente clave. Pero ya no solo para limpiar su caja y rellenar el comedero y el bebedero, sino también para interactuar con él. Que se sienta atendido, el cariño de otro ser vivo y esos pequeños gestos pueden marcar una gran diferencia para su bienestar, porque sentirán que están pendiente de él y haciéndole compañía, dándole paz durante tu ausencia, que ya de por sí es un caldo de cultivo de ansiedad para el animal.

Durante esas vacaciones hay que organizar la casa para que el felino no se sienta olvidado aunque no estés presente físicamente. Es una forma de buscar un equilibrio entre el respeto a su independencia y el cuidado de sus emociones. Ya no es simplemente un tema de lo que implica para el animal principalmente, sino también para nosotros mismos, porque el vínculo entre mascotas y dueños es tan fuerte que es prácticamente imposible poder disfrutar si sabemos o sospechamos que nuestro amigo peludo no está en las mejores condiciones.