El conductor de autobús ayuda a una estudiante a ir a la escuela y es despedido: "Soy nuevo, no conozco las reglas"

Un hecho de lo más inusual le ocurrió a Stéphane Lévesque, conductor de autobús de Saint-Alexis-des-Monts (Canadá), el cual fue despedido el pasado mes de junio simplemente por permitir que una estudiante subiera a su transporte para ir a clase. Según explican desde ICI Radio Canadá, el nombre de la chica no estaba en el listado de pasajeros aquel 28 de mayo, cuando sucedió esta historia. Y es que el hombre se dio cuenta que no le dejaban montarse, pero él sí que se lo permitió, sin saber las consecuencias que iba a tener esa acción.

Lévesque explicaba en el medio canadiense que no lleva mucho tiempo en la empresa y que no conoce todas las reglas, pero que su primera reacción fue pensar que la niña solamente quería ir a la escuela. "La animo a que lo haga. Tengo espacio y no haré un drama de esta historia", se dijo a sí mismo, aunque tenía más trasfondo. Al parecer, la joven de 13 años debía utilizar el transporte público porque no fue incluida en la lista de escolares del bus por no quedar plazas disponibles, tal y como comentaba su abuela, pero se subió por inseguridad e ir con sus compañeros.

La solución del centro educativo fue darle la alternativa del transporte público, pero este salía dos horas antes que el de la escuela e iba sola. "Fue realmente difícil, además de transportar a mi nieta, tengo que despertar a otros dos niños pequeños. Es una tontería que el transporte público salga dos horas antes por la mañana", comentaba la abuela de la pequeña, reflexión que Stéphane Lévesque secunda, puesto que considera que "la seguridad infantil es una responsabilidad social", así que cuando quiso ir en su vehículo "no podía ignorarla".

Pérdida de empleo

Todo este asunto lo conoció el conductor después, cuando contactó con la abuela para saber las razones de la ausencia de la adolescente en su lista de pasajeros. Además, también escribió al Centro de Servicios Escolares Énergie (CSS) para informar que había varios asientos disponibles en su autobús y que actualizaran los listados, sin embargo, la respuesta que recibió no fue la que esperaba. "Me dijeron: 'No tiene derecho a llamar a los padres ni a comunicarme con el CSS'. Quieren conductores, pero si quieres hacer un gesto amable, te dicen: '¿Y a ti qué te importa?'", se lamenta el hombre, que aunque entiende el razonamiento de las listas, no comprende lo sucedido.

"Entendí que no podía traer a niños que no estuvieran en mi lista, pero pensé que la lista podría actualizarse, ¿no? Intenté actualizarla contactando al Centro de Servicios Escolares, pero cuando mi empleador vio que seguía con mi proceso, me entregó mi carta de despido". Manifestaron que, al tomar estas medidas, Lévesque estaba saltándose "la reglamentación vigente relativa a las obligaciones contractuales con el Centro de Servicios Escolares", además de argumentar otras razones para sustentar que le echaran de su empleo.

En la carta de despido, Autobus Allard alegó una queja por exceso de velocidad y la divulgación y uso de información confidencial, si bien, el CSS confirmó a ICI Radio Canadá que no ha realizado ninguna solicitud para que se produjera la pérdida del trabajo del conductor, más si cabe teniendo en cuenta que apenas quedaban tres semanas de curso. Lo más rocambolesco es que la chica ha sido incluida en las listas del transporte escolar, gracias al esfuerzo de Stéphane que le llevó al paro. "Me parece una injusticia que mi nieta recupere su puesto en el autobús escolar y un hombre lo pierda", comentaba la abuela, que está agradecida con él: "No tenemos conductores así todos los días".