Un experto sale a la palestra para revelar la verdad tras uno de los mitos más inquietantes de las serpientes
El experto en serpientes Toni Beckman ofreció una explicación científica

Una serpiente, en una imagen de archivo. / Riadi Pracipta / 500px

La publicación de una fotografía en el grupo de Facebook Ask Nature ha generado un intenso debate entre los usuarios: en la imagen se veía una serpiente muerta que, supuestamente, había cambiado de posición tras su fallecimiento. La pregunta se volvió inevitable: ¿un animal muerto puede moverse?
Para aclarar el misterio, el experto en serpientes Toni Beckman ofreció una explicación científica.
“Una víbora mordedora es probablemente una suposición válida. Y, en este caso, parece una recién muerta”, evaluó.
Según Beckman, el cuerpo de una serpiente muerta puede permanecer sensible al tacto durante varias horas y reaccionar con movimientos reflejos.
“El sistema nervioso de las serpientes es diferente al de los humanos”, recordó el especialista.
Esto significa que, aunque el animal ya esté clínicamente muerto, su sistema nervioso aún puede generar respuestas involuntarias al estímulo físico.
Movimientos sorprendentes incluso tras la decapitación
El experto añade que este fenómeno no es exclusivo de una serpiente entera: “En las profundidades de Internet circulan vídeos donde una serpiente es capaz de morder incluso después de haber sido decapitada, y sus ojos aún siguen el movimiento”, revela Beckman.




