Selecciona tu emisora

Ir a la emisora
PerfilDesconecta
Buscar noticias o podcast

Le dieron tres semanas de vida así que vende su empresa y decide correr: pasan 3 años y su enfermedad sigue siendo un misterio

Salió a correr durante más de 3.650 días seguidos

Un hombre atraviesa corriendo el puente de Brooklyn. / ANDREW KELLY (EFE)

Un hombre atraviesa corriendo el puente de Brooklyn.

Correr todos los días durante más de 3.650 jornadas seguidas ya es algo sorprendente. Pero la historia de Rastislav “Rasty” Turk, empresario eslovaco afincado en Estados Unidos, va mucho más allá de una hazaña deportiva. Con 41 años, ha sobrevivido a una sucesión de golpes que habrían hundido a cualquiera: un diagnóstico médico devastador, el colapso de su matrimonio, una dura batalla legal y la venta forzosa de su empresa.

Hace tres años, los médicos le dieron solo tres semanas de vida tras sospechar un glioblastoma, el tipo de cáncer cerebral más agresivo. “Era lo único que me quedaba, seguir corriendo”, recuerda. Contra todo pronóstico, los síntomas desaparecieron de forma repentina. Ni siquiera los médicos lograron explicarlo. Hoy, aunque su salud sigue siendo un enigma, Rasty puede contarlo.

Pero la salud no fue su única lucha. Durante una batalla judicial de divorcio que se prolongó tres años, tuvo que seguir al frente de su startup Pex, un proyecto que llevaba más de una década desarrollando. La empresa había levantado más de 2.000 millones de coronas en inversiones y creado tecnología pionera en identificación de contenido para cumplir derechos de autor. Sin embargo, su vida personal y profesional se derrumbaba al mismo tiempo.

En plena crisis, también se topó con otro obstáculo: el colapso de Silicon Valley Bank cortó de golpe la financiación. Para entonces, dirigir la compañía se había vuelto insostenible. “Primero el banco quebró, luego el médico me dijo que me quedaban tres semanas de vida y, al mismo tiempo, recibí los papeles de divorcio. Todo se vino abajo”, confiesa.

La irrupción de la inteligencia artificial aceleró el desenlace. Muchas empresas empezaron a crear su propia música y vídeos, reduciendo el interés en la tecnología de licencias de Pex. Ante el panorama, Rasty y su equipo aceptaron vender la compañía a Vobile, firma especializada en protección de contenidos digitales. El acuerdo no fue millonario, pero permitió salvar el proyecto y dar continuidad al trabajo del equipo.

Pese a todo, Turk no quedó en la ruina. A lo largo de los años había invertido en otras empresas, entre ellas Figma, en la que fue uno de los primeros inversores y que recientemente salió a bolsa con gran éxito. Esa visión y esa capacidad de riesgo siguen marcando su camino.

Hoy, tras haber tocado fondo, Rasty comienza una nueva etapa. Reconoce que su historia no tiene un final feliz de película, pero sí una lección de resistencia. De los días oscuros en que creía que lo perdería todo, queda la certeza de que siempre se puede volver a empezar.

 

Directo

  • Cadena SER

  •  
Últimos programas

Estas escuchando

Hora 14
Crónica 24/7

1x24: Ser o no Ser

23/08/2024 - 01:38:13

Ir al podcast

Noticias en 3′

  •  
Noticias en 3′
Últimos programas

Otros episodios

Cualquier tiempo pasado fue anterior

Tu audio se ha acabado.
Te redirigiremos al directo.

5 "

Compartir