Un pasajero ofrece su asiento a una pareja para que puedan volar juntos pero la respuesta le deja sin palabras: "Ni hablar"
Al principio fue incómodo, pero luego tuvo una revelación

Asientos de avión / DuKai photographer

Una de las situaciones más controversiales a bordo de los aviones es la de las peticiones de cambios de asiento. En Newsweek, en el marco de una historia personal, destacan los resultados de una encuesta realizada en junio de 2023 a 1.000 pasajeros de avión en Estados Unidos y Canadá, todo a cargo del sitio web de reservas de viajes Kayak. Y, al parecer, las personas que participaron tenían mucho que decir sobre ello, dejando bastantes conclusiones.
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Explican en el medio estadounidense que concluyó que "se permite pedir cambio de asiento si se pide educadamente", ya que un 54% de los viajeros "tienen debilidad por la cortesía común", mientras que "no está permitido" solicitarlo "sólo porque no te gusta" el tuyo, con un 77% de los encuestados creyendo que "obtienes lo que obtienes y no te cabreas". Igualmente, tampoco está permitido pedir el cambio "solo porque estás nervioso al viajar", y es que el 64% de los viajeros piensa que "todos están un poco nerviosos, no solo tú".
Y, como hemos indicado, todo esto viene dado por la historia que publicó una persona en Reddit, la cual quedó algo desconcertada en un primer momento, siendo algo incómoda la situación, pero terminó siendo bastante reveladora cuando la vivió in situ durante el trayecto. Sucedió durante un viaje en un avión de Delta Air Lines y su experiencia fue muy comentada en esta red social que conecta a diversos usuarios a través de comentar ciertas temáticas.
Un cambio de asiento fallido
Esta usuaria comenzaba su historia explicando que tomó "un vuelo de último minuto" y le tocó el asiento que nadie suele querer, el del medio. La premura por conseguir un sitio y el hecho de haberlo hecho apurando hasta el final hizo que no pudiera elegir, así que se tuvo que aguantar. Sin embargo, a los pocos minutos de estar ya en el avión, se dio cuenta que las personas que estaban a su lado era un matrimonio.
Aseguro que se ofreció "desinteresadamente" a dejarles sentarse juntos, no por tener un mejor asiento, sino para no estar en medio de ellos separándolos. Su sorpresa fue cuando le respondieron que "ni hablar". "Al principio me molesté un poco, sobre todo por estar en el medio, pero mientras hablan por encima de mí durante el vuelo y se pasan cosas por encima (snacks, desinfectante de manos, etc.)… llegué a respetar la jugada", manifestaba la autora, que dice que aprendió bastante de esta situación.
"Siempre he elegido sentarme con mi esposo, pensando que era un reflejo de nuestra relación, pero me encanta la idea de que esta pareja se sienta lo suficientemente cómoda en su relación como para reconocer que el asiento del medio es un fastidio", reflexionaba en su escrito, porque aunque se tuvo que conformar con ese sitio, siempre se puede sacar algo bueno de cada situación que nos toca vivir, aunque no sea del todo bien vista en un primer momento.




