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Una empresa de renombre paga hasta 500.000 euros a los empleados que marchen voluntariamente: muchos han aceptado ya la oferta

Todo enmarcado en un programa de reajuste de gastos

Persona firmando un documento / Xavier Lorenzo

Una revolucionaria y algo cuestionada medida para la reducción de costes. Desde la poderosa empresa automovilística Mercedes-Benz han lanzado uno de los mayores programas de bajas voluntarias de la historia de la industria alemana con el objetivo de prepararse para un futuro que creen que es incierto y por el cual necesitan una reestructuración acelerada en departamentos clave. Todo esto está propiciado por algunas variables como la incursión de los fabricantes chinos en el sector con sus modelos eléctricos y el plan para el abandono de los motores de combustión para la próxima década.

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Sobre esto ya habló el presidente del grupo, Ola Källenius, quien defiende una ampliación de la producción de automóviles con motores de combustión, pues cree que "en lugar de penalizar a los fabricantes por no cumplir los objetivos de emisiones de carbono, sería mejor moldear gradualmente el mercado mediante diversos incentivos", como recoge Interia Motoryzacja, a pesar de dejar claro que están alineados con el objetivo de cero emisiones, que considera que es el futuro de la industria. Sin embargo, la forma de hacerlo es lo que no comparten y, por ello, se sienten obligados a acelerar el cambio interno.

Esto lo llevarán a cabo a través del programa llamado 'rendimiento de siguiente nivel', parte de un proyecto de reducción de costes de 5.000 millones de euros para 2027, el cual está dirigido a trabajadores de departamentos administrativos, informática y las conocidas como áreas intermedias, las cuales están formadas por personas que no trabajan directamente en la producción de vehículos. El condicionante del mencionado programa es la protección de los empleados alemanes contra despidos por acuerdos de empresa hasta 2034, por lo que Mercedes tendrá que presentar ofertas jugosas para que decidan marcharse voluntariamente.

Desde Handelsblatt hablan de paquetes de compensación que se calculan de manera individual en función de edad, antigüedad, puesto y salario, dando algunos ejemplos de a cuánto ascendería la suma. Para un gerente de equipo de 55 años con 30 años de experiencia y un salario de 9.000 euros al mes, la suma podría llegar a más de 500.000 euros, mientras que otro de 45 años, 20 de experiencia y sueldo mensual de 7.500 euros, podría percibir 300.000. Sin duda, montantes nada desdeñables y muy apetecibles para los empleados.

Compensaciones con fecha de caducidad

Como explican en el medio mencionado, solo los trabajadores que expresen voluntariamente su deseo de marcharse pueden acceder a este programa, el cual lleva activo desde abril de este año y que estará en vigor hasta finales de marzo de 2026. Como indican, Mercedes habría enviado alrededor de 40.000 propuestas, habiendo sido aceptadas un 10% de las mismas, es decir, 4.000 empleados han respondido afirmativamente a las ofertas recibidas para marcharse de la empresa. Sin embargo, la voluntariedad del mismo es bidireccional.

Esto significa que un trabajador puede expresar su deseo de marcharse, pero la empresa tiene la potestad de rechazar la solicitud si no le cuadra su cese. Y es que a pesar de querer una reducción de la plantilla motivada por la electrificación de modelos en el sector, la caída de la demanda y el aumento de los costes de los materiales esenciales, hay posiciones clave para ellos y necesitan también mantener la motivación de los trabajadores, de ahí las jugosas cantidades sin despidos forzosos. Y es que, aunque las indemnizaciones son muy apetecibles, los expertos señalan que esa reducción a gran escala podría derivar en una pérdida de valiosos conocimientos y habilidades en departamentos estratégicos que sería contraproducente.